Las imágenes de un hombre, que muchos medios identifican con un turista, tirándole ácido a una niña indígena que estaba sentada en una calle de Cancún están dando la vuelta al mundo por lo inexplicable y gratuito de la situación.
La pequeña se había parado a sentarse en lo que parece el escaparate de una tienda cuando el hombre se le acercó con la botella de agua fuerte y empezó a salpicarle, así que la niña se fue de allí para evitar que el líquido la rociara.
El hombre estaba tan empecinado en su tarea que siguió vaciando la botella incluso después de la que menor abandonase el lugar. El vídeo, subido a Facebook por Álvaro Ojeda, no ha tardado en hacerse viral indignando a todo aquel que lo ve:
Ojeda asegura que fue su primo quien grabó las imágenes en la ciudad mexicana, cerca de su trabajo. Añade que "desde mi punto de vista le hubiera dado un punta pie a este señor". Nosotros también.