Situación común para casi cualquier mujer en el planeta: entrar sola en un establecimiento y que te hagan una radiografía de todo tu cuerpo sin el menor disimulo. Menos corriente es que el ritual se realice cuando la chica va acompañada por un hombre, pero los hay que no se cortan un pelo, como el coprotagonista del siguiente vídeo.
La pareja estaba hablando con el dependiente de la tienda SEA Wireless en Lincolnton, una localidad de Carolina del Norte, Estados Unidos. Un tercer hombre, apostado en un mostrador lateral se entretiene mirándole el trasero a la chica y, de repente, el novio lo pilla.
Casi sin mediar palabra le propina un puñetazo que lo pone mirando a Cuenca y le tira la gorra al suelo. Las cámaras de seguridad captan el momento. "¿Cuál es tu problema, hermano?", dice el mirón antes de salir por la puerta. Los hecho ocurrieron, según el Daily Mail, el pasado 8 de agosto:
Lo mejor de la secuencia, además de la impresionante pasividad del dependiente de la tienda, es la respuesta de la novia. Avergonzada por la actitud violenta de su pareja le obliga a ir a pedirle perdón El hombre obedece en una agachada de orejas épica, sale, suponemos que le pide disculpas y regresa.
El dependiente, como no podía ser de otra manera habida cuenta de su sangre de horchata, sigue como si nada, enseñando móviles y atendiendo a la mujer, que tampoco parece realmente muy afectada por la escena. ¿Habrán vivido la misma película que nosotros?