Una república digital. Como lo de hacer efectiva la república durante más de ocho segundos se está probando más difícil de lo que esperaban -o más de lo que hacían creer que esperaban-, el procés esa criatura en permanente mutación, se ha puesto un nuevo objetivo, la república digital. No es una idea nueva, pero este sábado el conseller de Políticas digitales y administración pública rescató la idea como paso previo a la república "física".
Según dijo, España sigue funcionando de forma analógica y Cataluña es imparable en lo digital. Como es comprensible, la idea dio para mucho cachondeo en Twitter:
Y uno de los muchos mensajes parece que no sentó muy bien a dos de los principales influencers digitales indepes, Berlustinho y Gallifantes -la del perro de Jaén-.
Gallifantes fue la primera en reaccionar ante el agravio:
Al receptor se le vio muy preocupado por el ataque:
Hasta se hizo algún meme sustituyendo a Stallone en el cartel de Los Mercenarios:
Pero todavía peor le sentó a Bernat Castro, el otro influencer indepe citado, de quien en su día se dijo que era asesor de ERC y de Gabriel Rufián -algo que jamás se demostró-, que envió unos cariñosos mensajes privados a las tres de la madrugada.
"Amenacitas" es posiblemente la mejor descripción que se puede hacer de los mensajes. Parecen la vacilada de gallito que te soltaba el pijo de la clase en el pasillo, el "cuidadito conmigo que soy muy chungo" y poco más; nada que ver con cuando el matón te agarraba en el baño y te citaba en el descampado.
Más tarde, Castro desveló la conversación completa. Si le deja en mejor lugar ya es decisión de cada uno:
Pero sin duda lo más gracioso es lo que hace solo unos días decía de alguien que le había mandado un mensaje privado con un corte de pelo más o menos similar...
Clase. Pura clase la del influencer de la revolución de las sonrisas.