Ese concepto tan de primer mundo de creernos dueños y señores de todos los seres que pueblan la Tierra sigue dejándonos momentos realmente desagradables y de profunda vergüenza ajena. Si a esto le sumamos nuestra fiebre por documentar cada paso que damos en nuestra vida, nos salen cosas tan horribles como la que hizo esta mujer.
Un grupo de personas está visitando un lago en la ciudad Suiza de Lucerna. Se trata de una zona donde viven habitualmente cisnes, bastante comunes por esas latitudes. Aunque ponía claramente en un cartel que estaba prohibido alimentar a los animales, una pareja de turistas asiáticas empezaron a ofrecerle lo que parece comida a uno de ellos para captar su atención y poder retratarlo con el móvil.
Como el cisne demostraba ser más listo que ellas, comerse su comida y no salir en la foto, una de las turistas lo agarró bruscamente de su largo cuello para inmovilizarlo y poder sacarse un selfie con él. El vídeo, informa la edición suiza de 20 Minutos, empezó a difundirse a través de Snapchat para saltar a otras redes sociales y hacerse viral:
"¡Aun no saqué la foto!"
En las imágenes se escucha cómo una de las mujeres exclama: "¡un momento, que aun no saqué la foto"!. Cuando la turista trinca al cisne por el cuello se escucha claramente cómo el hombre que está grabando la escena dice un "what the fuck" que le sale muy de dentro, como nos saldría a todos, la verdad.
A raíz de la publicación del vídeo muchos suizos se mostraron indignados con el trato que los turistas dan a estos animales aunque también hubo quien justificó la acción de la mujer defendiendo que lo único que pretendía era "salvar" al cisne de atragantarse con lo que le habían dado previamente.