España es un conjunto de comunidades autónomas unidas por El Corte Inglés. Y a nadie se le da mejor tirarse de los pelos entre ellos que a los españoles, que somos una especie de aldea gala en la que nos encanta tirarnos los pescados a la cara. Excepto cuando Iniesta marca algún golito, entonces nos llevamos bien.
Desde Electomania, una web dedicada sobre todo a encuestas electorales, han querido saber los sentimientos de los españoles hacia las distintas comunidades y hacia sí mismos. El resultado es estas dos tablas, en las que podemos ver las filias y fobias entre españoles y españolas, dividido por provincias y por comunidades autónomas.
Ceuta y Melilla no salen bien paradas de la encuesta, siendo las dos autonomías que menos amores despiertan. Dejando eso de lado las ciudades y pasando ya a la península, Murcia, por hermosa que sea, es la que ocupa el fondo del pozo por debajo de Castilla y León.
Asturias, Galicia, País Vasco y Navarra son quienes mejores caen, posiblemente por aquello de que son lugares de buen comer y mejor beber. Es curioso que Lugo sea posiblemente la provincia más hater del país, con una intensa animosidad a Castilla La Mancha que se merece un estudio a parte, aunque Ceuta y Melilla no se quedan atrás.
Por cierto que el estudio no se limita únicamente a las comunidades autónomas, también a nuestros vecinos. Marruecos son los peores parados, pero los gibraltareños tampoco quedan mucho mejor -tanto decir que Gibraltar español para luego ponerles un 4,8.
Por otro lado Portugal es el mejor puntuado con un 8. Menos mal que Cristiano Ronaldo no nos eliminó del Mundial, hubiera roto una bonita amistad.