Una sociedad moderna y avanzada es aquella que no abandona a sus mayores ni a sus niños. Estas dos etapas de nuestra vida transcurren ligadas a la dependencia y, por ello, tenemos que ser conscientes de lo mucho que nos necesitan para su día a día. Aunque sigue habiendo familias que pueden y quieren hacerse cargo de los abuelos, en otras muchas situaciones se opta por buscar un hogar donde estén atendidos como se merecen.
Las residencias han sufrido una profunda transformación en los últimos años y proporcionan a las personas una calidad de vida que les ayuda a afrontar con tranquilidad y cuidados sus últimos años. La mayoría de los trabajadores de estos centros tienen una humanidad que trasciende a sus labores y, además de realizar su actividad laboral, transmiten un inmenso cariño a las personas que viven allí.
Es el caso de Óscar Calderón, que trabaja de auxiliar en la residencia Nuestra Señora de la Consolación de Sevilla. Él compagina su empleo en el centro geriátrico con su faceta de cantante. No en vano ha concursado en el famoso programa de Canal Sur Se llama Copla y cuenta con varios premios en certámenes musicales de Andalucía.
Los buenos días con una buena copla
Óscar ha decidido unir su pasión por la canción española y el buen hacer en su trabajo, así que su día a día transcurre regalando alegría a los residentes a través de la música, importantísima tanto para entretener como para entrenar la memoria de los mayores y evocar su infancia y juventud:
En el vídeo, que se ha hecho viral a través de Facebook y Twitter, Óscar sale entonando Señorío, de Juanita Reina, con gran maestría, mientras las personas que están a su alrededor lo escuchan encantadas. Pero no se trata de un momento aislado, el auxiliar no pasa desapercibido en el centro y su talento ha salido a relucir en muchas más ocasiones:
Personas como Óscar, cuya labor va más allá de sus tareas laborales, son dignas de admiración. Nunca está de más reconocer inmensa humanidad de los cuidadores y cuidadoras que realizan un trabajo vital e invisible, pero fundamental en una sociedad que protege a los más vulnerables.