Humor y redes sociales tienen últimamente una relación complicada. Hace 10 años, Twitter era un lugar en el que podías encontrar el humor más gamberro imaginable. Cuando se convirtió en una red de masas la cosa empezó a cambiar, y si no que se lo digan a Nacho Vigalondo, que una noche de borrachera hizo un chiste tonto que contenía la palabra “holocausto” (porque el chiste ni siquiera era del holocausto, en todo caso se mofaba de los negacionistas) que le acabó costando su colaboración con el diario El País. A raíz de esa polémica, Guillermo Zapata publicó varios tuits con chistes negros que incluían a Irene Villa, entrecomillados, que años después le costaron la concejalía de cultura del Ayuntamiento de Madrid.
Fueron los primeros síntomas de una flandersización de la sociedad que ha llevado a Cassandra Vera a los tribunales por un puñado de chistes sobre Carrero Blanco y más recientemente a Dani Mateo por el gag en el que se sonaba la nariz con la bandera española y por la que también tendrá que pasar por el juzgado -es curioso que el gag se reía, en realidad, del pollo que se podría montar si alguien hiciera algo así, por lo que en realidad la polémica posterior da gracia a un sketch que no hubiera tenido mucha gracia-.
Pero siempre hay gente dispuesta a recibir las iras de los ofendiditos por un buen chiste. Y así ha aparecido el meme de Video Killed the Radio Star, que toma el título de la mítica canción de The Buggles -y primer vídeo emitido por la MTV, por cierto- para llevar el humor hasta todos sus límites.
Y es que viendo algunos de las bromas uno solo puede decir "Aua-aua":
Aunque algunos buscan una aproximación más... cruda:
Este duele más que una bala a un elefante.
Y para otros hace falta saber un poco de historia:
Y de los Simpson, claro:
Y hasta los hay costumbristas:
Y no podían faltar los reyes de Internet...