Si eres de esas personas que ven un gato y se derriten, esto hará que directamente te evapores. Son gatos con un cromosoma de más, algo que en seres humanos causa síndrome de Down. Aunque en muchos casos se describe a estos animales como si tuvieran tuvieran este trastorno, técnicamente no es así.
El síndrome de Down se da cuando una persona tiene una copia extra del cromosoma 21, tres en vez de las dos habituales. Cada especie tiene tiene pares diferentes de cromosomas, por lo que se pueden dar trisomías que causen dificultades cognitivas y anomalías físicas, pero no se podría hablar de síndrome de Down.
Aclarado esto, en Instagram han proliferado perfiles de gatos con este tipo de alteraciones. De hecho, en los años 2000 Kenny salto a la fama, un tigre blanco que fue rescatado en Arkansas de un criador privado que se quería deshacer de él porque no era lo suficientemente guapo para vender.
Eso es porque en aquella época todavía no existía Instagram. Si hubiera existido, hubiera amasado millones y millones de seguidores. Un buen ejemplo es el de Maya, una gatita cuya peculiar apariencia ha servido para que su dueña lance un libro.
Y es que la gata lo vale:
Pero hay más. Aquí tenéis a Monty:
Y este es Belarus:
¿Son adorables o no?