Los dos operarios que estaban supervisando los trabajos de reposición del reloj en lo alto de una torre han vuelto a nacer, de eso no hay duda. La gran esfera se soltó y a punto ha estado de aplastarlos en su caída hasta el suelo. Fue la barandilla del cazo al que estaban subidos lo que finalmente se llevó el impacto.
Ocurría el pasado 28 de noviembre durante la colocación de la gran esfera del reloj de la torre Purdue, un histórico campanario situado en la ciudad de West Lafayette, en Indiana (Estados Unidos). Fue un testigo que observaba desde la calle quien captó con su móvil el preciso instante en el que el enorme disco se descolgó de la grúa y se precipitó al suelo.
Los trabajadores que estaban esperando para situarlo en el hueco correpondiente no tuvieron ni tiempo de reacción y le deben la vida a la barrera de protección de la plataforma elevadiza:
Finalmente nadie resultó herido y solamente se han tenido que lamentar daños materiales en el reloj, uno de los emblemas del campus universitario de la ciudad norteamericana.