Por fin llega ese día tan especial en el que el trozo de roca mojada en el que vivimos completa una vuelta alrededor del Sol, algo que no pasa cada día (guiño-guiño, codazo-codazo). Por eso es habitual que en estas fechas nos propongamos cambiar algunos hábitos para que nuestra vida mejore en alguna forma. Ya sabéis, adelgazar, encontrar novia (o novio) para que la abuela esté contenta, acabar esa novela que llevas un año sin tocar… nada como que nuestro planeta cruce una línea imaginaria en el cosmos para que nuestra voluntad se torne de hierro y cambie nuestra vida con música épica de fondo.
Luego llega el 15 de enero y te estás inflando a donuts mientras asumes que acabarás el año tan solo como lo has empezado y sin tener esa novela terminada. Por eso, en aras del realismo no mágico, vamos a proponer una serie de propósitos que podrás cumplir sin despeinarte.
Apuntarte al gimnasio y no ir
Ponerse en forma es siempre uno de los propósitos más repetidos y también que más fracasos acumula. Porque lo de ir a sudar en una cinta mientras huyes de un enemigo imaginario cuando podrías estar en el sofá de casa viendo Netflix y comiendo una bolsa de patatas puede hacerse muy cuesta arriba. Por esto es mucho más realista la idea de apuntarte al gimnasio y no ir. Tienes la ventaja de que muchos centros te permiten realizar la inscripción online, así que no tienes ni que levantarte del sofá.
No dejar de esnifar el aire fuera de una pizzería
Hay vicios que los tenemos tan interiorizados que nos resulta prácticamente imposible librarnos de ellos. Inspirar ese aire mantenerlo en nuestros pulmones y volverlo a dejar ir es uno de los mayores placeres de la vida. Pero es malo para las arterias, y todos dicen que deberíamos dejarlo. No, no vamos a hacerlo. La pizza es la vida y no hay voluntad en este mundo para separarnos.
Seguir soltero
Encontrar tu alma gemela con la que construir un proyecto vital juntos es uno de los grandes anhelos de muchas personas. Pero vamos a ser sinceros: para ello primero vas a necesitar un match de Tinder -uno que merezca la pena, de los que al menos te acuerdas haberle dado a me gusta-. Luego tienes que chatear, tener química, tener citas… ¡y luego encima tienes que prestar atención a otra persona!
Gastar por encima de nuestras posibilidades
Ahorrar. Hay que pensar en el futuro porque la movida de las pensiones se va a venir abajo antes o después. Peeero… aceptémoslo antes de que la realidad nos de un porrazo (otro). En este nuestro país el precio de todo sigue subiendo como si no pasase nada mientras que tu sueldo sigue anclado en una cifra que haría reír a tu yo-precrisis. Y el BCE va a dejar de comprar deuda española justo cuando toque la última campanada. ¿Ahorrar o comprar huevos?
No dejar de mirar tanto el móvil
Pero vamos a ver ¿tú sabes la de memes y tonterías que te perderás si no miras tu móvil ahora? ¿Qué es eso de ‘disfrutar el momento’? No, en serio. El 52% del tráfico mundial en Internet llega a través de móviles. Te necesitamos, no dejes el móvil.
2019 va a ser un gran año. Seguro.