2018 fue el año en el que los insultos argentinos se pusieron de remoda en España gracias al ya mítico cementerio de canelones y más tarde con el fiasco de la selección de Messi en el mundial de Rusia. Últimamente el frente de argentinos enfadados virales ha estado muy tranquilo, a pesar de la final de la Libertadores. Pero parece que con el 2019 la cosa no va a desfallecer.
Vamos a admitirlo, no es necesario ser argentino para comportarse como un orangután en celo al jugar a FIFA. Nada sienta peor que que un amigo te meta un gol en el último minuto cuando ya saboreabas la victoria y todos hemos pegado alguno que otro berrido.
Así que uno solo puede comprender esta indignada nota de voz de una reenfadadísima madre:
Vamos a admitir que nos morimos de ganas por escuchar el resto de notas de voz y toda la conversación, pero parece que Juan lo va a mantener bajo secreto de sumario. Viendo la nota que sí manda... ¿qué no le habrá dicho en las otras?