A Pedro Sánchez le gusta enviar mensajes edulcorados, y en una fecha como el Día Escolar de la Paz -que se celebra el 30 de enero para conmemorar la muerte de Mohandas 'Mahatma' Gandhi- no iba a ser menos. Además, le permitía hacer su segunda cosa favorita después de recordarnos que es presidente del Gobierno: tirar de currículum.
En los noventa, un jovencísimo Pedro Sánchez acompañó a Bosnia al exministro de Exteriores Carlos Westendorp, quien había sido designado como Alto Representante Internacional por la ONU en la pacificación de Bosnia-Herzegovina. Pedrito, como lo llamaba el exministro, era miembro de su gabinete.
Rememorar esa experiencia, no obstante, supone meterse en arenas movedizas para Sánchez: no era el jefe de gabinete, como figuró brevemente en su CV antes de un apresurado cambio en pleno escándalo por su tesis. Pero no quiso desaprovechar la ocasión para recordárnoslo con un mensaje líquido sin contenido real alguno, como suele ser habitual en él:
Ocurre que el conflicto yugoslavo es terreno conocido del terminator favorito de Twitter, Arturo Pérez Reverte, quien vivió la guerra de primera mano como reportero. Un tuitero con bastante mala leche decidió invocar al escritor, sabedor de que la cosa podía dar bastante juego.
Lo cierto es que el tuitero dio un pase espléndido. Tenso, y a una altura perfecta para rematar de cabeza apuntando a la base del palo, digno del mejor Xavi Hernández. Y escritor entró con todo como el Torpedo Müller para acribillar a la red con un solo y brutal toque:
Un buen francotirador, este Don Arturo.