A los líderes del procés siempre se les ha llenado mucho la boca de pacifismo y no se cansan de afirmar que son un movimiento cívico y educado. Sin embargo, no siempre encajan en esa autodescripción y en sus últimas acciones queda retratada su hipocresía.

Desde el pasado diciembre se han venido registrando ataques con heces a diversos juzgados de Cataluña. El último tuvo lugar el pasado domingo, cuando hasta 20 localidades encontraron los accesos a sus juzgados llenos de estiércol y basura.

La Asociación Profesional de la Magistratura de Cataluña denunció los hechos en las redes sociales:

Pero una fotografía posterior a este acto vandálico ha dejado en evidencia la poca puntería de los CDR que, al mismo tiempo que dicen protestar contra el poder del "estado opresor", no tienen ningún problema en dejar que sean los más alejados de dicho estado los que limpien sus estropicios de los que, por supuesto, no se hacen cargo los comités.

La portavoz de Ciudadanos en el Parlament, Inés Arrimadas, no desaprovechó la ocasión para tirarle un dardo a Pedro Sánchez y sus acercamientos a los independentistas para conseguir sacar adelante los Presupuestos Generales del Estado:

Y de nuevo, ha quedado en evidencia la clase de estos abanderados del civismo. Y es que una de las grandes influencers del procès, Gallifantes -la del perro que solo entiende catalán- le pareció muy normal lo de tirar excrementos a un edificio público:

Y es que a Gallifantes, que ya ha dado el salto de Twitter a protagonizar anuncios de la Crida Nacional de Puigdemont, no solo le parece mal que a Arrimadas le indigne que se tiren desechos a un juzgado, sino que también le parece mal que los Mossos d'Escuadra investiguen los actos vandálicos.

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