Es un hecho universalmente reconocido entre los seguidores de la actualidad que la cuenta de Twitter de Pedro Sánchez funciona a modo de oráculo. El presidente del Gobierno fue uno de los pioneros en comenzar a usar la red social hace una década, una época más inocente en la que el joven socialista volcaba sus impresiones y vivencias con una ingenuidad que ha dejado genuinas joyas.
De la "pizza cojonuda" al "ser malos, colegas", pasando por el "vaya paliza que me están dando" que tantas veces ha resucitado durante los sinsabores de primarias y sesiones de investidura, desempolvar el archivo de tuits de Sánchez es un ejercicio que casi siempre reporta tesoros para los atentos usuarios de la red. Pero el último hallazgo excede la anécdota: entre risas, el diputado bisoño parecía estar vislumbrando hace más de siete año su incierto futuro político a día de hoy.
El contexto es la publicación por sorpresa de Manual de Resistencia, el primer libro, según pregona su editorial, publicado en España de mano de un autor que ejerce al mismo tiempo de líder del Ejecutivo. La publicación ha causado controversia y no solo de tipo político: se trata de una situación insólita que plantea, por ejemplo, dudas en cuanto a un posible conflicto de intereses por su reacaudación.
Pero no es, desde luego, el primer político que publica sus memorias. Mariano Rajoy publicó en 2011 En confianza: Mi vida y mi proyecto de cambio para España. El libro salió a la venta en los meses previos a las elecciones generales en las que el candidato del PP arrasaría con mayoría absoluta contra José Luis Rodríguez Zapatero, en una España devastada por la recesión económica y la crisis mundial. Y Sánchez, disparando una de las pocas balas que quedaban en la trinchera del PSOE, tiró de sarcasmo.
Efectivamente: la publicación biográfica era a los ojos de Sánchez el presagio de que la carrera de Rajoy, que se acercaba a su cúspide en aquél momento, estaba acabada. Poco o nada queda que añadir considerando como ha envejecido este envite tuitero.