Las campañas electorales son como la Navidad: sobr eel calendario duran dos semanas pero en realidad son tres meses. Todavía queda hasta mucho hasta el 28 de abril, pero la maquinaria está tan a tope que, con total incertidumbre sobre cómo va a quedar formado el parlamento, los partidos ya se hacen ofertas unos a otros para gobernar.
El líder de Ciudadanos tendió por sorpresa la mano al PP para echar a Pedro Sánchez, pero demasiado tarde para el partido de la gaviota. Así que Pablo Casado respondió con una peculiar oferta a Albert Rivera, ofreciéndole entrar en su gobierno con la posición de ministro de Exteriores. Un puesto que algún malpensado diría que se le adjudica porque es catalán.
Rivera no contestó en un primer momento, pero por la noche acudió al programa de Pablo Motos, que el día anterior ya puso contra las cuerdas a Pablo iglesias. Evidentemente, tuvo que hacer una pregunta al respecto y Rivera no se mordió la lengua. Porque si se la muerde se envenena.
“Bueno, yo le podía ofrecer el ministerio de universidades”, respondió el candidato de Ciudadanos, en referencia a las informaciones que surgieron apuntando a que su supuesto máster en Harvard era en realidad un curso en Aravaca, además de verse envuelto en un escándalo similar al de Cristina Cifuentes del que finalmente salió exonerado.
Pablo Motos no suele meterse en política, pero con la proximidad de las elecciones generales se ha metido de pleno, invitando a los principales candidatos, como ya hizo en las anteriores. Y lo ha hecho con el cuchillo preparado, y si no preguntádselo a Santiago Abascal:
El primero que pasó por su plató fue Pablo Iglesias. Y la inesperada dureza de Motos al preguntar le puso en un aprieto:
¿Será que Pablo Motos hace méritos para ser la 'Oriana Fallaci' español?
[Más información: Albert Rivera ya no se llama así: éste es su nombre en las listas para las elecciones del 28A]