¿Qué te ha pasado, Tinder? Tú antes molabas. Hace unos años todo el mundo contaba batallitas sobre su última cita con una persona que había conocido en esta app para ligar. Sin embargo, con el tiempo, Tinder ha ido cambiando e incorporando nuevos arreglos que parecía que mejorarían la experiencia. Ahora se sabe que, simplemente, fueron creados para que la empresa ganase dinero.
Existía un rumor pululando por la Red sobre que Tinder utilizaba la puntuación Elo. ¿Que qué es eso? Esta un índice que se creó para clasificar jugadores de ajedrez, pero en Tinder tiene otra función. Todos los usuarios de la aplicación tienen una calificación secreta y que depende del número de me gusta que han recibido. Los usuarios que más gustan son los que más influencia tienen: si te camelas a uno de ellos, tu puntuación sube exponencialmente, y si a ti te gustan, pero te rechazan, tu puntuación se desploma.
La puntuación es muy importante porque en Tinder siempre han pensado que los usuarios con una puntuación similar tienen más posibilidades de hacer match (gustarse mutuamente, vaya). En teoría este método crearía diferentes niveles de Tinder: de más deseados a menos. De esta manera, sería prácticamente imposible que los menos apreciados por la aplicación apareciesen en las pantallas de los guapos.
Y es aquí donde entran en juego las primeras actualizaciones de pago que se inventó Tinder. La primera de ella, y la más famosa, fue el Super like. Se trata de un me gusta que informa al que lo recibe de que se lo han dado. Básicamente, sirve para llamar la atención de la persona a quien se lo diste. Esta herramienta estaba pensada para quienes conseguían pocos match. Por un instante, dejaba de ser efectivo el algoritmo y un usuario de un nivel inferior podía presentarse a una persona para la que era invisible.
Una comunidad estamental
Tinder te regala uno de esos al día y puede ayudarte a subir de escalafón si a la persona a la que se lo das también le gustas. Sin embargo, ahí no quedó la cosa. La empresa inventó una serie de herramientas para poder posicionarte en el Tinder de guapos. Boost, un rayo morado que hace que tu perfil aparezca durante un tiempo limitado en el Olimpo de las citas. Rewind, una flecha dorada por si te arrepientes de la valoración que le habías dado a un perfil que ya habías pasado.
Todas estas herramientas, que pueden ayudar a los usuarios normalitos a aumentar su número de citas, se obtienen por el módico precio de 16,94 euros al mes. Según algunos internautas, los hombres heterosexuales son menos exigentes que las mujeres heterosexuales y la puntuación Elo penalizaría a todos aquellos que diesen me gusta de manera indiscriminada. De esta manera, las mujeres serían el reclamo y estarían supuestamente contentas porque sólo verían a chicos guapos. Los chicos del montón pagarían por aumentar sus probabilidades y ensancharían los bolsillos de los gestores de la app.
Toda esta información eran teorías hasta hace muy poco. Sin embargo, Tinder publicó hace dos semanas un comunicado en el que admitía que había utilizado la puntuación Elo. Pero no solo eso, la app de citas más importante del mundo aseguró que había dejado este sistema de clasificación porque, según ellos, no aseguraba que los usuarios quedasen en la vida real.
Lo nuevo
A partir de ahora, Tinder premiará a los usuarios que más utilicen la aplicación. Cuanto más la use un usuario, más aparecerá en la pantalla de los demás. La empresa de citas también ha asegurado que conectará en más ocasiones a personas que estén en línea a la vez. Supuestamente, quienes más usan la red social son también los que más hablan y más quedan. Es decir, son los que buscan el amor con más ahínco, y eso le gusta a Tinder.
Pero internet es más perspicaz y, a pesar del sensible comunicado de Tinder en favor del amor, algunos internautas aseguran que sólo es una estrategia para ganar más dinero. ¿Por qué, justo ahora, Tinder lanza un comunicado de este tipo cuando no está acostumbrado a hacerlo? La teoría es que existen muchas personas que sospechaban de la puntuación Elo y hacían trampas para incrementarla, tales como: "a cada personas que te guste y le des me gusta, dale no me gusta a cinco". Otra teoría es que este método no ha asegurado que la gente encuentre el amor y que, por tanto, han abandonado la aplicación, cansados de esperar a la persona ideal.
Sigue siendo necesario pagar
En cualquier caso, el número de me gusta al día se encuentra limitado para quienes tienen la aplicación gratuita. Si un usuario paga, podrá utilizar la aplicación durante más tiempo y, según Tinder, eso le hará más visible para el resto de la comunidad tinderiana.
A pesar de ello, la aplicación móvil concluye su comunicado asegurando que todavía se guarda trucos en la manga, que no solamente conectarte a menudo te va a ayudar a acceder a la crème de la crème. Aunque los nuevos algoritmos son completamente secretos, algunos usuarios siguen pensando que el físico tiene una gran importancia para la aplicación. Las nuevas mejoras que ha incorporado Tinder en todo este tiempo permiten subir más fotos o hacerlas visibles durante más tiempo.
El apartado donde puedes contar tus intereses a la comunidad no ha aumentado los caracteres, pero puedes añadir en él una canción que te guste o más fotos de tu cuenta de Instagram. Es decir, Tinder es, ante todo, superficialidad y no quiere que le cuentes tu vida, sólo juzgar tu cara y tu cuerpo.
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