El líder de Unidas Podemos, Pablo Iglesias, ha coincidido en un ascensor del Congreso con el de Vox, Santiago Abascal, antes de acudir a las salas habilitadas en la Cámara Baja para entregar su credencial como diputado electo y acreditarse como parlamentario de la XIII Legislatura.
El encuentro se ha producido alrededor de las 12.00 horas en el interior del Congreso. Abascal, apoyado en muletas, ha llegado acompañado por parte de su equipo y, una vez en la Cámara, ha saludado a diputados electos de la formación como Pedro Fernández (Zaragoza), Manuel Mariscal (Toledo) o Agustín Rosety (Cádiz).
Luego se han desplazado hasta la zona de ascensores, y en cuanto se han abierto las puertas de uno de ellos, dentro estaba Iglesias, quienes se han saludado en un clima de cordialidad. Iglesias entregará sus credenciales como electo por Madrid este viernes, algo que Abascal ya hizo esta semana.
La conversación, según ha desvelado Iglesias, ha versado sobre la lesión deportiva sufrida por Abascal que le obliga a caminar con muletas. "Deberías ir al fisioterapeuta", le ha recomendado el líder morado. "Todavía no he ido. Los vascos somos así", ha replicado el verde.
Tras el encuentro, el líder de Podemos ha quitado hierro al episodio señalando la necesidad de “dejar a un lado el sensacionalismo” y explicando que “antes que políticos somos seres humanos”, por lo que “si le veo, le doy los buenos días”.
También Abascal ha explicado después que "es importante mantener la cordialidad". Si bien ha aprovechado para arremeter contra la formación de Iglesias por haber “enviado alertas antifascistas” que, según ha dicho, han acabado con escraches a dirigentes de Vox. “Nosostros no convocaremos alertas anticomunistas para que se vayan a hacer escraches”, ha asegurado.