Como si fuera la secuela de aquella ilusión óptica del vestido bicolor que nos había vuelto locos hace algún tiempo, estos días se ha popularizado en las redes sociales y WhatsApp un pequeño audio en el que algunos escuchan "Yanny" y otros "Laurel". Las discusiones entre estos y aquellos no han dejado que la sangre llegue al río de momento, pero sí han propiciado pequeñas disputas virales.
Ahora, rebuscando en la hemeroteca, hemos encontrado en este artículo de Wired el origen del dichoso audio que, por si lo habían pensado, no es actual. Tenemos que remontarnos al 11 de mayo de 2018 y presentaros a Katie Hetzel, una estudiante que, por aquel entonces, cursaba primer año en la escuela secundaria de Flowery Branch en Georgia (Estados Unidos). Ese día estudiaba para la asignatura de Literatura y buscó la palabra "laurel" en Vocabulary.com.
Reprodujo el audio y, en vez de escuchar "laurel" escuchó "yanny". Relata la joven que se lo preguntó a sus amigos y compañeros y todos entendían cosas distintas, así que lo publicó en las stories de su Instagram orgullosa de su hallazgo. Poco después, otro estudiante del mismo centro, Fernando Castro, volvió a publicar el clip en la misma red social incorporando una encuesta:
De Instagram el audio pasó al Reddit de RolandCamry, un amigo de Castro, y se hizo viral en la red social y en Twitter. Ahora, casi dos años más tarde, vuelve a la palestra y cruza el charco para obligarnos a cambiar un poco de tema durante esta pandemia.
Explicación de científicos
Como suele pasar con casi todo, la Ciencia tiene también explicación para esto. La recogen en el mismo artículo, citando a varios académicos que describieron la grabación como una "figura ambigua". Se hacen eco también del artículo de The Verge en el que un neurocientífico auditivo lo comparó con la ilusión óptica del Jarrón de Rubin, en la que algunas personas distinguen el jarrón y otras dos perfiles encontrados.
No hay una respuesta correcta y otra incorrecta. Coinciden los científicos en que lo que escuchemos dependerá de las frecuencias que enfatice nuestro cerebro. Los que tengan capacidad para captar sonidos con frecuencia más alta decantarán la balanza por "yanny", mientras que las más bajas lo harán por "laurel". Por cierto, la edad influye en esto y los más jóvenes tienen más probabilidades de escuchar la primera fórmula.
En el artículo mencionan también otras explicaciones técnicas, como la potencia de los altavoces o auriculares con los que escuchemos o la propia acústica de la habitación. También podría influir en qué plataforma lo estamos escuchando porque Twitter e Instagram comprimen los archivos de vídeo de maneras distintas. Va a ser que las disputas tendrán que acabar en tablas forzosamente.
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