El cómico Miguel Lago ha publicado un desafortunado chiste mezclando a la Infanta Elena con las personas con parálisis cerebral y Twitter se debate entre la indignación y los límites (necesarios o no) del humor. La polémica por su chascarrillo sigue trayendo cola días después de que decidiese borrarlo y parece que va para largo. Por lo pronto, políticos como la diputada de Vox, Macarena Olona, ya le han querido poner las pilas.
Lago se grabó un vídeo en mitad de la carretera en el que se le veía delante de una señal en la que se podía leer "Centro Parálisis Cerebral Infanta Elena". El humorista acompañó las imágenes de la siguiente frase: "He tenido que parar el coche. Máxima difusión". El aluvión de críticas ante un amago de chiste —que de nuevo tiene muy poco— no se hizo esperar, obligándolo a tomar la determinación de eliminarlo de Twitter.
Sin embargo, en estos tiempos de captura de pantalla rápida el borrar no es garantía de olvido, ni mucho menos. Así que la polémica, lejos de extinguirse, se avivó en la red social. El propio Lago reconoció que acababa de eliminar sus tuits porque "no me compensa darle a mis enemigos carnaza para su disfrute" y quería "una noche de domingo tranquila"; pero ya era tarde. Intentó explicar después que lleva años haciendo este tipo de humor negro y que es un "hijo de puta", colgando de nuevo los mensajes que previamente había desechado:
De entre todas las críticas que ha recibido Lago una de las más aplaudidas ha sido la que le ha dedicado la diputada Macarena Olona, que explica que el centro que sale en la imagen es el que está en Campello, Alicante. Además, la de Vox recomienda al cómico que un día se acerquen a conocerlo porque "les vendría muy bien para tener algo de empatía con quienes no han tenido tanta suerte como él en la vida":
Todo un 'zasca' que no ha pasado desapercibido: