Todo puede ser posible en este 2020, incluso que al PP le salgan díscolos. O díscolas, más bien, porque estamos hablando de Cayetana Álvarez de Toledo. Ella ha roto esa especie de pacto que lleva años silenciando a los políticos populares que pasan a un segundo plano. Si bien entre las formaciones de la izquierda estamos más que acostumbrados a escuchar una retahíla de confesiones cuando un miembro se siente apartado, en las filas del Partido Popular solían guardar bien los muebles y contener a los desleales.
Pero claro, a Cayetana le sacan de la portavocía y ella no iba a estar de acuerdo, como ya demostró desde el principio en aquella rueda de prensa que dejó a Pablo Casado temblando. Ahora, para darle una vuelta de tuerca más y dejarle claro al líder del PP que va a tener su aliento en la nuca, Álvarez de Toledo se ha abierto un canal de YouTube. Sí, además de marquesa, youtuber.
La exportavoz le ha puesto CATilinarias a su canal y este martes ha publicado su primer vídeo: Los cuarenta y cuatro. Se refiere a los 44 diputados del PP que han asistido al Congreso por los límites de aforo derivados de la pandemia. Explica Cayetana que a ella no la han incluido en esa lista de elegidos y se lo dice a "los votantes y exvotantes" de su partido, consciente de que despierta las pasiones entre las filas más próximas al ideario de Vox.
Alternativa constitucionalista
Cayetana explica a sus seguidores, más de 8.000, que ha decidido seguir como diputada porque continúa pensando que "una alternativa constitucionalista es posible en Cataluña" y también porque "España no puede ser un tablero inclinado en el que las formaciones nacionalistas y la izquierda juegan con ventaja":
Con casi 50.000 visualizaciones durante el primer día, Álvarez de Toledo no solo arrancó algunos aplausos con su nueva faceta de "diputada rasa", sino que también (y, sobre todo) ha provocado un sinfín de chistes y alguna que otra recomendación:
Si continúa con estos vídeos, va directa a convertirse en el azote de Casado.