Hace un par de semanas Twitter amanecía con la noticia de la ruptura de Pablo Echenique e Iñigo Errejón en la red social. Los que habían sido colegas en un pasado no muy lejano ahora habían llegado hasta el punto de dejar de seguirse mutuamente después de que el primero le afease al segundo su paso por La Sexta Noche criticando a Podemos. El chivatazo no lo dio ningún periódico, sino la cuenta GobiernoAlerta (@GobiernoAlerta), un bot que nos mantiene al tanto del salseo entre los políticos tuiteros.
Al timón está el podcaster de tecnología Alex Barredo, que explica al otro lado del correo electrónico que la idea de poner a un bot a rastrear las miserias tuiteras de los políticos españoles se inspiró en @TrumpsAlert: "Arrancó hace más tiempo y repasa qué hacen los diversos miembros de la administración y la familia de Donald Trump en el período 2016-2020", ahonda. Esa idea le llevó a crear primeramente @BigTechAlert, "un perfil que seguía automáticamente los movimientos en las cuentas de diferentes empresas y ejecutivos de tecnología".
Así que GobiernoAlerta, matiza, "es una adaptación del software que programé para el @BigTechAlert". Para los que no somos duchos en la materia, el creador nos explica su funcionamiento de una forma sencilla: "Cada varios minutos comparamos la lista de cuentas que siguen y se envía un mensaje notificando si una cuenta falta o aparece". También es capaz de rastrear los tuits que marcan como favoritos, cambios de perfil y el resto de datos públicos, claro.
La política tuitera
Con el engranaje dispuesto, a Alex solo le faltaba elegir a qué políticos haría el seguimiento. "He ido recopilándolos a mano, sin ningún tipo de orden ni concierto más allá de tener a todos los miembros del Ejecutivo, cuentas oficiales y algunos políticos y parlamentarios destacados", confiesa, añadiendo que "cada poco añado alguno que recomiendan o que me cruzo". En total, son 128 los perfiles de los que da cuenta GobiernoAlerta y su creador tampoco quiere que se magnifique para evitar confusiones.
Tampoco ha hecho falta ninguno más para que la actividad del bot de Alex haya trascendido a los medios de comunicación, que hemos recibido esta herramienta tuitera con los brazos abiertos en un tiempo donde la política del Congreso de los Diputados se parece mucho a Twitter y éste empieza a ser casi igual de trascendente que la tribuna del Congreso de los Diputados. Por eso, el cotilleo sobre Echenique y Errejón no ha sido el único que ha copado titulares:
"Hay un perfil muy concreto de político ultra obsesionado con Twitter y contar sus movimientos en público es muy revelador", anticipa Barredo, señalando que ese extremo "unido a la obsesión similar de muchos periodistas, crea una tormenta perfecta de cotilleo e información que contextualizar". Así, por ejemplo, GobiernoAlerta nos comunicó que Irene Montero había dejado de seguir a Teresa Rodríguez tras su sonada bronca en la red social.
Errar no es solo humano
No obstante, la cuenta no es infalible y puede cometer errores, principalmente, por dos motivos. Porque una cuenta puede haber bloqueado a otra que el sistema monitoriza y el bot, por defecto, dirá que la cuenta monitorizada ha dejado de seguir a la anterior. El motivo es que no se puede comprobar si una cuenta bloquea a otra porque esos datos no son públicos. También complica las cosas que una cuenta haya sido eliminada, suspendida o desactivada.
"Hace dos semanas tuvimos un desliz en Ciudadanos que desmintieron en Maldita", admite Alex. La alerta en cuestión se refería a Inés Arrimadas que dejaba de seguir y seguía de nuevo a Toni Cantó. "Mi mayor miedo es que el bot revele algo que hiera la sensibilidad de alguien y acabe en batalla interna en su partido o, peor aun, en inestabilidad política para España, alguna comunidad autónoma o Ayuntamiento", dice en plan sarcástico.
"Amor y paz"
El creador considera que "a veces, estamos gobernados por adolescentes" por eso no descarta que ocurra algo así "y quizá lo responsable sea apagar el bot antes", duda. Con ganas de poner en funcionamiento más perfiles similares "porque hay mucho interés, mío y de otros, por dar transparencia a otros sectores o verticales", Alex Barredo lanza un "mensaje de amor y paz para todos los políticos".
Lo hace acordándose también de "sus ayudantes y community managers que se han resquemado estos meses con el bot acusándolo de inventarse cambios, algo que es claramente mentira", apostilla, añadiendo que "el software es extremadamente simple y los mensajes salen según lo dice la API de Twitter". Desde luego, pensarán sus políticos y sus equipos, uno ya ni puede hacer un unfollow tranquilo.