España side liderando los datos del paro juvenil en la Unión Europea. El pasado mes de enero se registraba un 39,9% de desempleo entre los menores de 25 años, ocho puntos más que el año anterior y casi el doble de la tasa europea. Con estos datos en la mano quizás sea más fácil entender la historia de Nuria, una joven de 20 años nacida en Algeciras (Cádiz) y residente en Madrid, que busca desesperadamente un lugar donde hacer las prácticas que le permitan titularse.
La estudiante se ha preguntado en un hilo que han compartido miles de personas qué será de ella en el mercado laboral si ni siquiera puede encontrar dónde realizar las prácticas obligatorias para obtener el título de Comunicación Audiovisual. Fue el pasado 10 de noviembre cuando Nuria lanzó su petición desesperada a través de un vídeo que se hizo viral, en el que empezaba diciendo que "la cosa está muy mala".
Confesaba que incluso le había escrito a Javier Olivares —guionista y creador de series como Los Serrano, Los hombres de Paco, Isabel o El Ministerio del Tiempo, entre otros muchos—, pero llegada a este punto necesitaba "venderse" para poder seguir "contando historias". Explicaba que lleva escribiendo "toda la vida", que ha sido redactora en una revista de literatura juvenil durante seis años, que ha trabajado para editoriales y tiene dos novelas escritas.
Todavía sin prácticas
Nuria también escribe canciones y las produce, hace ilustración, dibujo y animación, además de fotografía y documental. Ha grabado un podcast con estudiantes internacionales cuando estuvo en Corea del Sur y también un cortometraje y ha hecho una adaptación de un videoclip. Para completar, la joven además domina el inglés y está aprendiendo otros idiomas:
Su vídeo lleva más de 200.000 reproducciones, pero Nuria todavía no tiene prácticas, así que ha decidido volver a la carga con un hilo en el que dice cosas con las que muchos jóvenes españoles con talento se sentirán totalmente identificados:
Y es que a Nuria, como a otros muchos, les contaron un día que para triunfar tenían que irse de su ciudad, esforzarse mucho y no parar de hacer cosas. Pero ahora la paradoja es que tendrá que volver a Jerez, la ciudad donde ha crecido, para poder hacer las prácticas:
Por eso, aunque dice que está demasiado cansada para reivindicar, lo cierto es que sí lo ha hecho porque leerla invita a reflexionar sobre muchos aspectos de un sistema que, obviamente, no funciona:
Y, como es normal, tampoco quiere que la desesperación le lleve a tolerar una relación laboral que no es aceptable:
No, Nuria, no querer que te maltraten no es tener las expectativas altas, y que no te convenzan de lo contrario.