Antonio García Ferreras estaba abordando este lunes las palabras del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, sobre los indultos a los presos del procés cuando ocurrió algo excepcional en algunos televisores de nuestro país.
Todo transcurría con normalidad en el plató de Al Rojo Vivo, de La Sexta, con los contertulios y el presentador cambiando impresiones sobre la cuestión del día, cuando la emisión fue interrumpida por una conocida serie de televisión.
Aquí no hay quien viva llegaba a sus pantallas como por arte de magia, sin aviso y sin que nadie hubiese tocado el mando. Un corte que, además, no ha durado poco sino que ha estado cerca de unos diez minutos emitiéndose.
Al regresar a la programación de La Sexta, la cadena estaba en publicidad y poco después el programa de Ferreras ha vuelto sin hacer ninguna mención al incidente, como si nada hubiese pasado.
Pero algo había sucedido y un buen puñado de telespectadores se había dado cuenta. Así que, para corroborar que no se habían vuelto locos, acudieron al lugar al que va todo el mundo a buscar consuelo y respuestas cuando suceden este tipo de cosas: Twitter.
De hecho, no solamente ha habido preguntas y comentarios sarcásticos sobre Ferreras, sino que la teoría de que habían hackeado La Sexta ha cobrado forma en pocos minutos:
Finalmente el tema se ha esclarecido sin tener que llamar a Íker Jiménez, menos mal. Han sido usuarios de Movistar lo que han sufrido esa intromisión por un cruce de señales, tal y como han aclarado desde la plataforma.
De hecho, la señal original de La Sexta ofrecida en la TDT y en otros operadores no ha sufrido ningún percance y se ha visto a Ferreras perfectamente. A los afectados, la compañía les ha recomendado reiniciar el descodificador para subsanar la incidencia:
Un misterio resulto que, no obstante, ha mosqueado a más de un espectador de Al Rojo Vivo.