Tras haber sido uno de los sectores más afectados por la crisis derivada de la pandemia, la hostelería lleva meses cogiendo impulso y arrastrando un grave problema de falta de personal. Si algunos hosteleros reivindican que no son capaces de encontrar a gente capacitada para trabajar en sus locales, los camareros denuncian que las condiciones laborales en muchos de los establecimientos rozan la esclavitud en pleno siglo XXI.
El debate se ha encendido en las redes sociales durante las últimas semanas y no dejan de aparecer testimonios de trabajadores que acreditan el marco laboral que parece indiscutible para cierta parte del sector. Soy Camarero es una cuenta de Twitter que, entre otras cuestiones más amables, se dedica a difundir las malas experiencias de los camareros y camareras que reciben ofertas laborales que les abocan a la explotación.
El último ejemplo que se ha hecho viral no es una oferta laboral, sino un reproche del hostelero a su equipo, a quien acaba ordenando que no se pongan enfermos durante el fin de semana. El jefe no calculó bien que lo que uno escribe por WhatsApp es muy sencillo de difundir y ahora media España sabe lo que les ha escrito a sus trabajadores, a los que echa en cara que en nuestro país los médicos "te dan justificante de lo que tú quieras".
"No cobrará bote"
Así, el jefe continúa su rapapolvo diciendo que no se cree que tengan problemas de salud un viernes o un sábado, "sobre todo los camareros que son todos jóvenes y a muchos les gusta la marcha, empalmar de la disco al trabajo". Bajo esa premisa, les dice que va a tomar la determinación de privar del cobro de propinas a los que se pongan enfermos el fin de semana y a quien no le gusta le recuerda que "hay dos puertas grandes para salir":
Como era de esperar, la captura de pantalla de la conversación se ha hecho viral acumulando más de 60.000 reacciones e incluso llamando la atención de políticos como el líder de Más Madrid, Íñigo Errejón, que ha citado el tuit para criticar que haya "un mercado laboral sin ley":
Además de Errejón han sido muchos otros los que han querido denunciar abiertamente la actitud del jefe, contar su propia experiencia al respecto o recomendar que se denuncien esas prácticas ante la inspección de trabajo:
Con este tipo de mandatos no es de extrañar que la hostelería acuse una falta de trabajadores puesto que los camareros querrán al menos estar cubiertos en caso de baja laboral, como les corresponde por derecho.