Late Motiv, el programa que conducía Buenafuente en Movistar+, se ha despedido este jueves de su audiencia después de siete temporadas haciendo gala del mejor humor y la mejor música en directo. Esta última edición ha estado llena de sorpresas —como la participación inesperada de Joana, la hija de Andreu y Silvia Abril—, incluyendo la visita virtual del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, para charlar con el presentador durante un rato divertido.
"Esto cuenta como agenda de trabajo. Como eres Premio Nacional de Televisión, cuenta como asunto de Estado", ha ironizado Pedro Sánchez al otro lado de la pantalla, en mangas de camisa llevando lo que parece un chaleco, al tiempo que Buenafuente le replicaba, con mucho humor, que "aunque esté hablando con un catalán, esto no cuenta como mesa de diálogo" ante las carcajadas del público.
Sánchez ha querido recordarle al presentador que en estos años de emisión ha tenido que soportar que su figura haya sido objeto de infinidad de chistes, así que "me vas a permitir que hoy sea mi turno", ha pedido el jefe del Ejecutivo. Sin embargo, aunque lo esperábamos, no ha hecho ningún chascarrillo, sino que ha enviado un mensaje de cariño a él y a su equipo: "Quería trasladarte mi agradecimiento por todos estos años en los que has estado trabajando y promoviendo la cultura, la música en vivo, el cine, la comedia".
"Un rato muy agradable"
"Muchas noches nos has hecho ir a la cama con una sonrisa y eso es un don que tú tienes", le ha dicho a un Buenafuente visiblemente emocionado. Además, poco después el presidente compartía el vídeo en su cuenta de Twitter dando las gracias por la invitación. "Ha sido un rato muy agradable y divertido", ha escrito, deseando suerte para su nueva etapa y confesando que está ansioso por verlo "en otro proyecto para poder seguir disfrutando de tu profesionalidad y humor":
Aunque la intervención de Sánchez en el late night ha sido vista con buenos ojos, en general, por la audiencia de Buenafuente, no ha sido así con los críticos del presidente, que han aprovechado para saltar con una retahíla de zascas. Le han echado en cara que se ocupe de estos asuntos más triviales en mitad de la sexta ola e incluso le han acusado de querer lucirse en televisión:
Sea como fuere, este guiño de Sánchez a Buenafuente ya ha quedado como un momento histórico de la televisión.