Lluvia de zascas a Gabriel Rufián por su polémico comentario sobre los ganaderos de Lorca

La semana ha comenzado movidita en cuestiones informativas tras el impresionante asalto al pleno municipal de Lorca protagonizado por la patronal ganadera de la zona. Durante el altercado, que fue grabado en varios vídeos que han corrido como la pólvora en las redes sociales, decenas de personas se saltaron el cordón policial y llegaron a agredir a algunos de los agentes para lograr finalmente acceder por la fuerza al recinto. 

Se iba a celebrar la sesión plenaria este lunes en el Centro de Desarrollo Local de Lorca y en el séptimo punto de la orden del día se iban a debatir algunos cambios en la regulación de las granjas porcinas que se asientan en la localidad. El alcalde, el socialista Diego José Mateos, había optado por realizar el pleno a puerta cerrada y blindar el acceso al público, pero los ganaderos lograron entrar llevándose por delante de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad para impedir que se llevase a cabo la votación. 

Uno de los asaltantes al pleno se ha entregado voluntariamente este martes ante la Policía Local de Lorca. Según los agentes se trata de "el único ganadero que agredió claramente a un agente y le causó lesiones". Los vídeos que han circulado por Twitter han facilitado la identificación de varias personas. El sospechoso ha sido trasladado a la comisaría de la Policía Nacional que es quien instruye el caso. 

El tuit de Rufián

En este contexto, las fuerzas políticas han condenado la violencia con mayor o menor énfasis, a excepción de Vox. La formación de Santiago Abascal no solo no ha condenado el asalto sino que ha dicho que "entendemos su situación". Por su parte, el portavoz de Esquerra Republicana de Catalunya, Gabriel Rufián, ha optado por escribir un tuit en su habitual tono irónico para mofarse del tratamiento que ha recibido la noticia:

Así, usando una comparativa como suele hacer en muchos de sus chascarrillos, Rufián ha considerado que "la patronal ganadera que asaltó el Ayuntamiento de Lorca eran emprendedores indignados", pero los manifestantes por la negociación del convenio del metal en Cádiz "fueron violentos radicales". El de ERC pretendía así burlarse de la empatía que algunos, como Vox, han mostrado con los asaltantes, en contraposición a la beligerancia con la que terminaron por juzgar a los gaditanos.

En todo caso, pronto llegarían otras comparaciones mucho más odiosas para él:

Es lo que pasa cuando uno condena o no la violencia según su conveniencia.