De vez en cuando, a la lista de tendencias de Twitter se asoma un nombre que no suele prodigarse por estos mundos de las redes sociales. Cuando se trata de alguien con una edad, antes de dar un clic para ver qué ha sucedido, una siempre teme que la noticia sea de las malas. Este domingo, sin ir más lejos, el respingo se lo debemos al cumpleaños de Antonio Gala, que ha hecho 92 años. Este lunes, en cambio, el peor de los presagios se ha cumplido con el que fuera su mejor entrevistador: Jesús Quintero.
El periodista onubense ha fallecido a los 82 años en la residencia de Nuestra Señora de los Remedios, en Sevilla, cuando se echó a descansar después de haber comido con normalidad a pesar de su afección respiratoria y una reciente operación cardíaca. Conductor de programas tan emblemáticos como El loco de la colina en Radio Nacional, que le valió ese mismo apodo, o el Ratones Coloraos del Canal Sur, había dicho en su última entrevista a EL ESPAÑOL, en febrero de 2020, que llevaba "20 años de psicoanálisis con las preguntas que tanto hice".
No solo su nombre ocupa lo más alto de la lista de trending topic, sino que "descanse en paz" le sigue de cerca, algo que sin duda reconfortará a sus hijas. Un vistazo rápido sirve para constatar que Jesús Quintero aun era de esos personajes que gozaban del consenso de las dos españas aunque nunca hubiese ocultado sus cojeras. Así que hemos seleccionado una muestra de algunos de los tuits que se están escribiendo sobre su figura y su legado, desde el cariño y la admiración que prácticamente todo el mundo le profesaba.
Hoy, para Twitter, es un día tan triste que hasta los hacedores de memes han dejado las bromas para otro momento:
En esta tiranía de la inmediatez en la que vivimos, con poco espacio para la reflexión y un tiempo que cada vez dura menos, las entrevistas de Quintero son una quimera. Su modo de entrevistar se estudiaba desde hace décadas en las facultades de Periodismo por incluir un sencillo pero certero método: los silencios prolongados. Cuando el entrevistado contestaba, él continuaba callado y no le daba la réplica en el margen esperado, provocando inseguridad en su interlocutor.
Así, al otro lado de la mesa, esa persona entendía que lo que había dicho no era suficiente y seguía dando más detalles, ampliando su respuesta, y cayendo rendida a los pies de Quintero, en resumidas cuentas. No es de extrañar, entonces, que su método para hacer cientos de entrevistas a gente anónima y famosa, con el mismo rigor y respeto a unos y otros, haya sido uno de los aspectos que más han destacado los tuiteros:
Cuando fallece un periodista de este calibre, es común que la profesión cierre filas y muestre su admiración. Por lo tanto, no es extraño que el periodismo español se esté pronunciando en masa sobre la trascendencia de la figura de Quintero, pero también lo están haciendo cientos de tuiteros anónimos, recuperando unos y otros algunos de los fragmentos más memorables de sus programas:
Tampoco han escatimado en lamentos de otro tipo, recordando sus palabras e incluso dedicándole unos versos:
A pesar de los pesares, del lamento, de la despedida, también ha habido espacio para las risas que, por otro lado, ocuparon muchos ratos en la vida de Jesús Quintero. Y es que no hay que olvidar que las generaciones más jóvenes lo conocieron ligado a dos figuras imborrables de la cultura popular de los 2000: el Cuñao y el Risitas.
Cómo no iban a estar ellos dos presentes en el imaginario colectivo en un día como el de hoy.