Empezaron a ponerse de moda durante la pandemia y su aceptación ha ido variando con el paso del tiempo. Los vídeos de TikTok protagonizados por sanitarios comenzaron su andadura en nuestro país llevándose todas las ovaciones, puesto que nadie cuestionaba la necesidad de que estos profesionales tuvieran sus momentos de desconexión en una época tan dura. Sin embargo, la percepción social de estos contenidos ha ido variando y actualmente ha llegado a suscitar las críticas en Twitter.
El pasado mes de julio se cargaban tintas contra una enfermera estadounidense que empleó el fallecimiento de un paciente para ganar likes. Pero antes, una vez que la pandemia se fue diluyendo y las listas de espera en Atención Primaria volvieron a anchearse, los sanitarios se situaron en el punto de mira para muchos. En esta ocasión, un baile de menos de 30 segundos ha servido para incitar al debate, relacionándolo además con el tiempo de demora de una prueba diagnóstica.
El tiktoker que ha subido el contenido es Antonio Muñoz Cabell, un fisioterapeuta que trabajaba para el Servicio Madrileño de Salud (SERMAS) y tiene más de 58.600 seguidores. Junto a dos de sus compañeras ha hecho un playback con una coreografía en las instalaciones hospitalarias. No obstante, su performance ha sido cuestionada por un tuitero, que aboga por controlar la jornada laboral e incluso les culpa de tardar "nueve meses para una resonancia":
El vídeo lleva más de 1,6 millones de reproducciones y las reacciones dispares han provocado que Antonio haya puesto el candado a su contenido en TikTok. Por un lado, algunos han dado la razón al tuitero:
Pero, en líneas generales, una mayoría ha defendido el derecho de los sanitarios ―como el de cualquier trabajador― a tener sus ratos de descanso:
En todo caso, 30 segundos de TikTok no parecen suficientes para retrasar una resonancia magnética 9 meses.