En los ochenta se popularizó la frase "en la calle son el Che y en la casa Pinochet" para señalar que el machismo es transversal y que los hombres de izquierdas son igual de machistas que los de derechas. Ahora, la vicepresidenta segunda del Gobierno, Yolanda Díaz, bien podría haberla sacado a colación este miércoles, pero prefirió abreviar y referirse a este tipo de falsos aliados diciendo que son "un peñazo".
Lo ha hecho en el noveno aniversario de Micromachismos de eldiario.es, durante una charla con la periodista Ana Requena. La también ministra de Trabajo y Economía social advertía que no está negociando con ninguna formación política por el momento, reiterando que maneja su propio proyecto político, sin tutorías de nadie. Se reafirmó en que "soy libre y estoy harta de ser de hombres. Tengo vida propia, perfil propio y proyecto propio".
Ahondando en el perfil del falso aliado que termina siendo machista aunque se camufla mejor, Díaz no se ha cortado a la hora de decir que este tipo de hombres son "un peñazo": "Con perdón, pero los hombres de izquierda son un peñazo", ha reiterado, añadiendo que "no hay peor cosa en el mundo" y que cree que "los hombres en nuestro país deberían reflexionar y tomarse muy en serio los cambios sociales que está habiendo en España y en el mundo", matizando que algunos sí han hecho este ejercicio:
Las declaraciones de la ministra han sorprendido mucho por el fondo y por la forma, puesto que Yolanda Díaz suele controlar los discursos y dejar poco margen de reinterpretación o, como en este caso, de reapropiación. La derecha, empezando por el portavoz de Vox en el Congreso de los Diputados, Espinosa de los Monteros, ha aplaudido su frase e incluso se ha atrevido a añadir un matiz:
Pero no ha sido el único, sino que muchos hombres ―especialmente en el sector de la derecha tuitera― han salido a criticarla con comentarios como estos:
Salvando las distancias, la reflexión de Díaz recuerda a la que hizo en su día Ángela Rodríguez Pam cuando dijo que "lo que más me cabrea del universo son los hombres de izquierda", argumentando que sus conocimientos se basaban en el postureo: "Es el típico tío de izquierdas en plan: 'Yo me leo todos los editoriales de los periódicos y además escucho La Base [pódcast de Pablo Iglesias] y luego me leo mis libros. Sé muchísimo de Gramsci y mira qué cosas retuiteo. Leo prensa internacional en francés, en inglés y tal...'. Y es cómo: tienes una idea geopolítica del mundo, tú antes que nadie sabías lo que había que hacer en la guerra de Ucrania, antes que nadie sabían cómo abastecer a España de vacunas, pero eres incapaz de entender lo que ha pasado con la ley del solo sí es sí".