Dice la escritora Olivia Sudjic en el libro Expuesta que la vigilancia constante de internet es a la vez "exposición y confinamiento". La autora de este ensayo comenta esa sensación de dar a conocer tu vida a través de las redes sociales y el consecuente juicio al que se somete cada acción.
Quizás por eso, habiéndonos pasado de frenada en el tema de mostrar cada parte de nuestro día a día, hay una zona en sombra que no se ve en la pantalla. La imagen idealizada y en ocasiones exagerada que algunos usuarios pretenden dar de ellos mismos se puede tornar en una gran mentira si se le ve el envés.
Hay casos a menudo. A los influencers, cuya construcción social de su imagen está 24 horas en tela de juicio, no es raro verles haciendo cosas solo por las apariencias. Ha ocurrido con aquellas personas que salen realizando cosas que no hacen a menudo y se les pilla. O que presumen de algo y luego se descubre la farsa. En los ejemplos más sonados, quienes se fotografían leyendo con despreocupación interesante y luego alguien ve que es una pose en toda norma.
Lo de esta historia es aún peor. No solo porque el fraude del postureo sea enorme, sino porque llega a ser casi dañino. Una influencer se ha fotografiado fingiendo que limpia una playa de Bali, en Indonesia, pero después deja la basura tirada en el mismo sitio. Y no es solo una irresponsabilidad: es algo absurdo que ha sido cazado por otra cámara.
Tal y como se puede observar en las imágenes difundidas en redes sociales, la joven se hizo una sesión de fotos limpiando la playa y guardando los residuos en una bolsa de plástico. Al acabar de posar, hacer algún baile o postura que le gustase para las fotografías, abandona la basura y deja la bolsa de plástico en la arena.
¿Cómo fue la secuencia de los hechos?
El problema es que todo estaba siendo registrado por otro usuario de redes desde la distancia. Este testigo inesperado ha colgado desde su ángulo todo el proceso y le ha dado un tono humorístico para acompañar a las bochornosas imágenes. El vídeo trata de hacerse pasar por un tutorial paródico para "enseñar cómo hacer que parezca que te importa el plantea".
"Grábate recogiendo basura, monta una escena digna de Oscar como si tuvieras que combatir el viento mientras limpias la playa, celebra tu buena obra con un baile y por último deja las bolsas de basura atrás cuando ya hayas acabado", locuta en los segundos que dura el vídeo.
Un vídeo que ha acumulado más de 32 millones de reproducciones, 310.000 "me gusta" y todo tipo de comentarios al respecto, la mayoría por parte de usuarios mostrando su indignación. "Vivimos literalmente en la costa aquí en Florida y vemos esto todo el tiempo. Y siempre salen de la playa peor que cuando llegaron, sin falta. Debería grabarlos y hacerlos virales en mi página, me alegro de que alguien lo haya hecho", se quejaba uno.
"Estas personas son terribles. Recuerdo a un vlogger que les daba dinero a las personas sin hogar, pero después de filmar pedían que se lo devolvieran y solo les daban una pequeña compensación", apunta otro. "¿Cómo duerme en paz por la noche y en cualquier otro momento?", "resumen perfecto de la sociedad actual" o "salvar la Tierra recogiendo el único material biodegradable. Supongo que cumplió su deseo de volverse viral" son más reacciones a esta pillada que expone la hipocresía de las redes.