Los viajes en avión se han convertido en un medio de transporte habitual. Las distancias se han estrechado gracias a este sistema y, salvo el periodo más duro de la pandemia, los aeropuertos vuelven a lucir abarrotados. A la ventaja de moverse de un sitio a otro en mucho menos tiempo que con otro método se le han sumado algunos inconvenientes que incomodan a la gente.
Uno de los más reseñados es el relativo a las esperas. El tiempo previo a la entrada y el posterior. La facturación, los arcos de control, el embarque... Y al aterrizar, lo mismo: un autobús a la terminal, una cola para salir y la temida cinta por donde salen las maletas. Frente a esa pantalla con el origen del vuelo y el equipaje apareciendo de la nada, la impaciencia se dispara.
Y ahora ya podemos saber más o menos de qué depende esta espera. Un trabajador del aeropuerto internacional de Vancouver ha desvelado en un vídeo de TikTok qué ocurre cuando el equipaje se entrega en la dársena de facturación. Dj Sugue, como se hace llamar en esta red social, se ha grabado dentro del compartimento en el que finalizan las maletas y ha explicado que hay que seguir un orden concreto.
Este orden no depende del tamaño de las maletas o de si son de la misma persona. Después de la distribución en aviones y de la carga en la bodega, llega el turno de bajar todo a tierra y distribuirlo. Este orden corresponde al tipo de maletas: prioridad, conexión y local. Así, aquellas que sean prioritarias serán las primeras que se coloquen en la cinta, seguidas de las maletas que deben cambiarse a otro vuelo y, finalmente, el resto del equipaje.
Pero, aparte, es interesante saber todo el trayecto. Cuando tus maletas desaparecen por esa cinta tiene que haber todo un engranaje para que llegue a cada avión y se dé en un tiempo concreto. Una vez está en orden, se carga en la bodega y se lleva hasta el destino. Al descender, y dependiendo del siguiente paso (si es solo una escala o es el destino definitivo), suelen tardar en 10 y 20 minutos en poner en marcha las maletas.
Según lo que muestra el trabajador, la solución para no esperar demasiado a que salgan las maletas es seleccionar el embarque prioritario en el momento de reservar un vuelo. Lo ofrece la mayoría de compañías aéreas. En cualquier caso, siempre está la incertidumbre de si saldrá o no, de si habrá que ir a las reclamaciones para pedir que te la envíen más tarde o de si dará tiempo a que se cargue en otro vuelo.
Y también está la certidumbre de que las maletas tienen un viaje parecido al de los pasajeros. Con decenas de kilómetros entre cintas transportadoras, miles de kilómetros en el aire, controles de rayos X y policía pendiente de cualquier objeto sospechoso. Lo que sea, con tal de que llegue a destino.