Los más jóvenes quizás no recuerden a Anthony Blake, pero para el resto es casi imposible no acordarse de este hombre omnipresente en la televisión de los 90 y los primeros años de la década de los 2000, especialmente después de haber acertado el número de El Gordo de Navidad hace 21 años. Ahora, José Luis Panizo González, que así se llama en realidad este asturiano, ha regresado a la palestra para hablar de aquella misteriosa efeméride que protagonizó y se ha aventurado además a dar un nuevo número.
Nacido en 1955 en Oviedo, desde pequeño supo que lo suyo era la magia y el mentalismo, dejando de lado la carrera de Medicina que empezó a cursar para contentar a sus padres y decantándose por el estudio de "técnicas y disciplinas muy variadas que le han permitido afrontar diferentes retos", explica en su página web. Habla allí de "el poder de la mente", asegurando que es un estudioso del "mundo psíquico, esotérico y paranormal", miembro de la Psychic Entertainers Association (PEA).
Blake dio su gran salto profesional de la mano del mítico programa Un, dos, tres... ¡responda otra vez! de Televisión Española y después se prodigó en Telecinco con Crónicas Marcianas, alcanzando su pico de popularidad y pasando después a Antena 3 con De domingo a domingo y Otra dimensión. Creó sus propios espectáculos, con los que todavía sigue girando por toda España, y participó en el programa de Carlos Herrera en Canal Sur, en Blake (2007) y desde 2017 en el talent show Pura magia, de TVE.
"Había un enano"
No obstante, siempre será recordado por haber acertado el número de la Lotería de Navidad en 2002 en un truco enmarcado dentro de un reto de Antena 3. Estos días ha recordado el momento en sus redes sociales, aprovechando varias de las entrevistas que le están haciendo. Así, se han recuperado algunas de las imágenes de aquel día en el que dijo que tocaría el 08.103 y así fue. "Detrás había mucho trabajo, muchos años de exprimirse la cabeza y muchos años de 'os voy a volver locos durante mucho tiempo', y la verdad es que lo he conseguido", ha valorado:
El show de 2002 se realizó en directo en el centro comercial La Vaguada, en Madrid, donde se anotó el número en uno de sus libros y lo metió en una caja que estaba vigilada por una cámara las 24 horas del día y a la vista del público. Solo Blake, Mar Saura y Securitas Direct tuvieron acceso a la urna, que el día 22 de diciembre se trasladó a las 7:30 horas en un furgón blindado a los estudios de Antena 3. La llegada se pudo ver también al segundo, mientras los niños de San Ildefonso cantaban el número 08.103.
La presentador abrió la caja y descubrió que el número coincidía: "Es el reto más importante de mi vida... Si fuera una tomadura de pelo, para mí sería un drama. Si después de montar todo esto resulta ser un bluf, no me volvería nadie a mirar a la cara y profesionalmente sería la ruina y me tendría que ir de España", valoró entones Blake, al que muchos acusaron enseguida de haber hecho alguna treta. Llegaron a decir que ese día había una persona con enanismo escondida en la urna, algo que el mentalista desmintió.
¿Tocará el 09.754?
"El truco era mucho más sofisticado, elaborado y divertido que todo eso, creo que lo del enano se lo inventó el productor", zanjó. Ahora, 21 años después, Blake rememora en varios medios de comunicación la hazaña y en TV3 se ha atrevido incluso a pronosticar un nuevo número ganador. Entre risas, y pidiéndole una cifra a cada persona presente en el plató de Tot es mou, se ha decantado por el 09.754 para que sea El Gordo que salga del bombo este viernes 22 de diciembre. Lo ha hecho más como una anécdota, pero poco después los décimos comenzaron a volar, por si las moscas.
"Lo de 2002 fue un acto de provocación de un artista para llamar la atención, ni la Inteligencia Artificial ni los videntes podrían hacerlo", ha explicado el mentalista, que además de sus espectáculos imparte conferencias y cursos sobre comunicación no verbal y programación neurolingüística. También ha publicado tres libros: Tu poder mental, Tu poder intuitivo y Lo que sé del más allá, donde propone ejercicios para entrenar el poder de la mente, la memoria y dominar el subconsciente.