Ibai Llanos se ha convertido en uno de los streamers más reconocidos a nivel mundial. Con 15,4 millones de seguidores en Twitch, 14,6 millones en X, 11,3 millones en YouTube y 9,9 millones en Instagram, recibe cada día millones de comentarios en sus redes sociales.
Su actividad trasciende al mundo virtual, llegando a organizar eventos del calibre de la Velada del Año o la Kings League junto a Piqué. De hecho, por esto último recibió el Premio Ondas a Mejor Programa de Entretenimiento este año. Además, el streamer ha impulsado un cambio en el paradigma de las redes sociales, convirtiéndose en una alternativa al mundo televisivo para seguir eventos tan importantes como las Campanadas en su canal de Twitch desde hace cuatro años.
Ibai utiliza sus redes sociales no solo como narrador de League of Legends, el videojuego más conocido como LOL, sino también como un vehículo para contar aspectos de su vida más personal. Hace dos años, el streamer reveló que padecía un problema de visión debido a un problema en su nervio óptico, causado por una infección de herpes que sufrió en edad infantil, una afección a priori minoritaria, pero que se ha traducido en esta compleja secuela.
"Yo decía que era lo típico, por culpa de la pantalla, lo que muchos habréis pensado. Estoy ciego, necesito gafas", comentó. En una visita al oculista, el profesional le dijo que "tenía la vista perfecta". Esto implicaba que su problema de visión tenía una causa neurológica, en concreto, se debía al nervio óptico. "He perdido el 70% de la vista del ojo izquierdo", señaló entonces.
Este viernes, Ibai habló a sus seguidores sobre cómo había evolucionado su problema de visión. El streamer se sinceró con El Xokas en su último Charlando tranquilamente.
Ibai Llanos se confiesa con El Xokas
El Xokas quiso preguntar al streamer por su estado de salud porque, aseguró, le "preocupaba bastante". "Tú no hablas mucho de esto porque no quieres que la gente esté triste viéndote", señaló. Ibai explicó que tiene el 100% de visión en su ojo derecho y, aunque tiene problemas para "jugar a videojuegos, ver ciertas cosas en la calle, ver un partido de fútbol y estar lejos", puede hacer su "día con normalidad". "Puedo streamear, salir de fiesta, jugar al fútbol, baloncesto...", explicó.
Sin embargo, no sucede lo mismo con su ojo izquierdo, donde acusa el problema de visión. "Yo del ojo izquierdo no veo nada, tengo un 5-10% de capacidad, prácticamente no veo de un ojo", confesó Ibai, que aseguró que "cada mes y medio" debe acudir al médico a realizarse una revisión. No obstante, el streamer tranquilizó a sus seguidores y explicó que ahora se encuentra "medicado y estable".
Según reveló Ibai, "en teoría", el problema de visión está "totalmente controlado". Aunque no se trata de una enfermedad degenerativa, el streamer contó que se ha sometido a distintas pruebas para evitar que afecte a su ojo derecho. "Me he estado tratando muchísimo y estoy con medicación para que no me pase lo mismo en el otro ojo", contó a El Xokas.
Su problema de visión, que comenzó a afectarle en el año 2017, cuando pensaba que se debía a pasar mucho tiempo delante del ordenador, está ahora "estable", aseguró. Por ello, aunque lo note cuando juega a videojuegos si tiene las luces de la habitación apagadas, no le da mucha importancia ya que "todo está bajo control".
El vídeo de Charlando tranquilamente junto a El Xokas acumula ya casi 600.000 visualizaciones en YouTube y se ha colocado en los primeros puestos en tendencias de la red social, generando miles de comentarios positivos hacia el streamer. En cambio, hace unos días Ibai hizo frente a las críticas de sus seguidores por su cambio físico. "Muchos intentáis hacerme daño y otros incluso me llegan a hacer gracia", escribió en un hilo de X.
"El principal problema que tengo con mi cambio físico es que no me doy la suficiente prioridad a mí mismo. No me cuido. Ni física, ni mentalmente", aseguró. Sin embargo, el streamer desveló que, pese a que llegó a perder 17 kilos hace unos meses, ahora se encuentra enfocado en su trabajo. "Sé que se puede ver como una excusa. Lo puede ser. La realidad es que tengo que pensar mucho más en mí", explicó.