En las últimas horas se ha hecho viral en redes sociales un vídeo que parece ser antiguo, pero ha salido a la luz en las últimas horas. En el vídeo se ve a varios niños de poca edad echar laxante a varios paquetes de patatas y comida en general. Después de intoxicar la comida, van a la playa y tiran allí la comida, donde hay gaviotas.
Las aves, como no, van sin pensarlo a por la comida y lo que sucede a continuación es el motivo de la viralización del vídeo. Tras ingerir la comida, las aves empiezan a defecar sin parar por los alrededores de la playa, manchando a todo el personal que por allí se encontraba.
El vídeo ha causado sensación en redes sociales por su peculiaridad, pero si bien es cierto que puede causar sonrisas, también ha recibido muchas críticas por el acto de los niños que, a fin de cuentas, intoxican a unas inocentes aves.
La viralidad de los vídeos en las redes sociales ha alcanzado niveles sin precedentes en la sociedad actual, alimentando una búsqueda ansiosa por la notoriedad instantánea a cualquier costo.
Este fenómeno ha llevado a individuos a cometer actos deplorables y peligrosos, como el que muestra el perturbador video de las gaviotas en la playa. La obsesión por capturar la atención de las masas y obtener likes y compartidos ha eclipsado la sensatez y la moralidad, llevando a algunos a perpetrar actos indignantes simplemente por unos breves momentos de fama efímera en el ciberespacio de las redes sociales.
Esta desesperada carrera por la viralidad, lejos de promover la creatividad y la positividad, ha generado un terreno fértil para la proliferación de conductas irresponsables y hasta crueles, poniendo en peligro tanto la seguridad como el bienestar de los demás.