Hay una actividad que nos une a todos los españoles, independientemente de nuestra clase social, ideología política, nivel de ingresos u orientación sexual. Además, es una rutina perfecta para combatir el calor en estos días tan abrasadores. Nos referimos, como no podía ser de otra manera, al acto de beber cerveza con amigos o familiares en un bar.

Sin embargo, es muy probable que alguna vez te hayan servido una cerveza cuyo sabor y condiciones de salud no sean las más recomendadas. Nos lo cuenta Edu Siveiro, un hostelero creador de contenido que en su cuenta de Instagram comparte vídeos, recomendaciones y trucos que todo amante de los bares debería conocer.

Para él, es imprescindible fijarse bien en la copa en la que nos sirven nuestra cerveza. Si en su parte inferior observamos que se acumulan pequeñas burbujas, tendremos que ser conscientes de que se trata de una copa cuya higiene es incorrecta, por lo que la calidad de la cerveza dejará mucho que desear. Nos lo explica en el siguiente vídeo:

Como nos explica el propio Edu, esas burbujas pueden estar en nuestra copa por tres motivos distintos que las retienen. El primero podría ser el polvo, el segundo la grasa y el tercero un mal aclarado. Es decir, en muchos casos en los que observemos burbujas en el interior de la copa, probablemente sea porque queden los restos del detergente, lo cual puede impactar negativamente en el sabor de la cerveza. Pero no sólo en el sabor. El verdadero riesgo está en que esos restos afecten a la salud de la bebida.

Y es una pena, porque, además de estar riquísimas y ser una excelente alternativa contra el calor, beber una cerveza con moderación puede ofrecer varios beneficios. Hay que tener en cuenta que contiene antioxidantes, vitaminas del grupo B y minerales, como el magnesio y el potasio. Además, ayuda a la hidratación por su alto contenido en agua y puede favorecer la digestión.

Por si fuera poco, la cerveza tiene propiedades relajantes, lo que puede reducir el estrés y mejorar el estado de ánimo. Además, su consumo moderado está asociado con un menor riesgo de enfermedades cardíacas y osteoporosis. Su efecto social también es notable, ya que fomenta la interacción y el disfrute en reuniones. Sin embargo, es esencial consumirla con responsabilidad para evitar efectos negativos.

Así que ya sabes, si quieres disfrutar de una buena cerveza estos días, fíjate siempre en si la copa en la que te la sirvan tiene estas pequeñas burbujas.