Si eres un gran amante de las patatas fritas, pero no acabas de hacerlas en casa como te gustaría, tenemos una buena noticia para ti. No tires la toalla, lo tuyo tiene solución aún. A continuación te presentamos una serie de consejos que, si los sigues al pie de la tabla, verás cómo te quedan unas patatas fritas que ni en los mejores restaurantes. Presta atención y toma nota.
Los trucos nos los enseña la creadora de contenido Eva Gourmet Bilbao, que en su cuenta de Tiktok comparte recetas sencillas, ideas de comidas y cenas saludables y consejos relacionados con el mundo de la cocina como estos que vas a ver. ¿Estás listo? Vamos allá.
Empezamos, como no podía ser de otra manera, por el principio. Lo primero será que peles las patatas y las cortes en rodajas del mismo grosor. Una vez hecho, corta las rodajas a su vez, en bastones del mismo tamaño. Asegúrate de que más o menos todos los bastones tienen las mismas medidas tanto de grosor como de longitud.
Una vez cortadas, será entonces el momento de sumergirlas en agua fría. En un recipiente amplio, vierte agua fría, incluso puedes añadir algunos hielos. Sumerge todas las patatas y espera media hora. Si es necesario, cambia el agua para garantizar que las patatas siempre estén en contacto con el frío.
Pasada esa media hora de la que hablábamos, llegará el momento de sacar las patatas del recipiente. Sírvelas en un trapo y asegúrate de que quedan lo suficientemente secas, por lo que no te agobies si tienes que ir secándolas una por una. Una vez secas, añádele sal y aceite, y mezcla todo bien.
Y llegamos al último paso. Eva lo hace en su freidora de aire o airfyer, pero también lo puedes hacer en el horno. Lo importante es que lo calientes, ya sea la freidora de aire o el horno, y una vez ya haya cogido temperatura, introduces la mezcla. Y lo dejas estar diez minutos a 190 grados.
Cuando ya se hayan cumplido esos diez minutos, le das un meneo a las patatas, para que no haya unas que queden más quemadas que otras, y cuando ya tengas de nuevo las patatas bien repartidas, vuelves a introducirlas en el airfryer o en el horno, lo que hayas elegido. Ahora sólo tienes que esperar unos 15 minutos aproximadamente, también a 190 grados. Y ya tendrías unas patatas fritas dignas de los mejores restaurantes.