Es la primera vez que desde 1941, cuando el INE comenzó a recoger datos en una serie homogénea de nacimientos y defunciones, que se registra un crecimiento vegetativo negativo en España. Es decir, el pasado año hubo más defunciones que nacimientos de madre residente en el país. La diferencia: 2.743 personas.
Así lo advierte el Instituto Nacional de Estadística en los últimos datos difundidos sobre "Movimiento Natural de la Población (Nacimientos, Defunciones y Matrimonios)".
En cuanto a mortalidad, durante 2015 fallecieron en España 422.276 personas, lo que supuso un 6,7% más que en el año anterior. La tasa bruta de mortalidad se situó en 9,1 defunciones por mil habitantes, frente a 8,5 del año anterior.
Además, la tasa de mortalidad infantil fue de 2,8 defunciones por cada mil nacidos vivos, la misma que en 2014. Esta tasa se mantiene por debajo del umbral del 3,0 por mil desde 2013.
En cuanto a los nacimientos, desde 2008, cuando fueron alumbrados 519.779 niños (el máximo en 30 años), el número de nacimientos se ha reducido un 19,4%. La tasa bruta de natalidad se situó en 2015 en 9,0 nacimientos por cada mil habitantes, dos décimas menos que la registrada en 2014.
DISMINUYE LA ESPERANZA DE VIDA
La esperanza de vida disminuyó en 2015 respecto al año anterior en 0,2 años y se situó en 82,7 años.
Por sexo, en los hombres alcanzó los 79,9 años (0,2 menos que en 2014) y en las mujeres se situó en 85,4 años (0,3 menos).
De acuerdo a las condiciones de mortalidad del momento, una persona que alcanzara los 65 años en 2015 esperaría vivir de media, 18,8 años más si es hombre y 22,7 más si es mujer.