La Universidad de Extremadura otorga títulos y plazas de profesor a amigos del asesor del rector
El grupo del Departamento de Enfermería GIEMO ha compuesto durante años tribunales a medida para otorgar tesis entre ellos.
23 septiembre, 2016 00:41Noticias relacionadas
Alumnos, profesores y examinadores. Todo en uno. Estos tres roles son los que han estado desarrollando un grupo de docentes del departamento de Enfermería de la Universidad de Extremadura (UEX) en la última década para conseguir, entre ellos mismos, componer tribunales de tesis a medida y concursos de plazas de funcionario a su antojo, para así luego otorgar títulos de máster y doctorado a sus propios compañeros de trabajo con las más altas calificaciones sin inhibirse, como marca la ley, por el conflicto de intereses.
Al frente de este grupo de profesores se encuentra Juan Diego Pedrera, ex responsable del departamento de Enfermería y actual asesor en materia de ciencias de la salud del rector de la UEX, Segundo Píriz. Pedrera es el coordinador del grupo de Investigación en Enfermedades Metabólicas Óseas (GIEMO), y aparece reiteradamente entre los miembros de los tribunales que han juzgado las tesis universitarias de sus compañeros de departamento investigador.
Dentro del grupo investigador GIEMO se encuentra la esposa de Pedrera, María Luz Canal; el decano de la Facultad de Enfermería, Jesús María Lavado; el responsable de calidad del campus, José María Morán; la secretaria del departamento, Purificación Rey, y el director del departamento, Julián Fernando.
Hay numerosos casos que evidencian la notoria relación entre aspirantes y garantes de que ese proceso académico fuese legal. En la tesis doctoral de María del Carmen Costa - precisamente del grupo de investigación GIEMO- aparece como director Pedrera al que agradece sus correcciones y confianza para realizar el estudio. Hasta aquí, todo en aparente orden, pero en el miembro del tribunal que juzgará la tesis aparecen los compañeros de GIEMO José María Morán y María de la Luz Canal, esposa de Pedrera, su responsable de tesis.
La evidencia no queda aquí y la aspirante a conseguir el doctorado, conociendo que sus compañeros de departamento de investigación serían los encargados de juzgarla, no tiene reparos a la hora de hacer constar su relación con ellos en el apartado de agradecimientos: “A mis compañeros de GIEMO, del que con gran orgullo y satisfacción formo parte”. Y más: “A Luz Canal con la que empecé desde hace tiempo, estando siempre a mi lado y José María Morán, son solo por la ayuda en este trabajo, sino por ese sincero compañerismo que hace que el día sea más grato y llevadero”. El resultado, la máxima nota.
EL EPICENTRO: EL MATRIMONIO PEDRERA-CANAL
En otras ocasiones, el matrimonio Pedrera-Canal se intercambiaban los papeles y el que fue, como en el caso anterior, director de tesis pasaba a ser parte del tribunal, y viceversa. Es el caso de la tesis presentada por Raquel Rodríguez Llanos, presidenta del Colegio de Enfermería de Cáceres, en el que los directores fueron Morán y Canal (en el tribunal anterior) y el presidente de los evaluadores Pedrera. También aparecen en el tribunal de esta tesis doctoral otra miembro de GIEMO, Purificación Rey, y el actual consejero de Salud del Gobierno de Extremadura, José María Vergeles, que a su vez es compañero de filas socialistas de la autora de la tesina.
La actual presidenta del Colegio de Enfermería de Cáceres tampoco muestra reparos en sus “profundos” agradecimientos y encabeza estos con el presidente del tribunal: “Al profesor doctor Juan Diego Pedrera por su confianza, que desde un principio creyó en el proyecto y ha convertido en realidad lo que para mí era un sueño”. De nuevo, máxima calificación.
Ante este tipo de conflictos derivados de las relaciones personales entre juez y parte, la ley del Estatuto Básico del Empleado público lo deja muy claro y es tajante en lo relativo a la conducta ética: “Deberán actuar con arreglo a los principios de objetividad, integridad, neutralidad, responsabilidad, imparcialidad, etc”.
Además, su actuación, dice la norma, se fundamentará en consideraciones objetivas orientadas hacia la imparcialidad y el interés común “al margen de cualquier otro factor que exprese posiciones personales, familiares, corporativas, clientelares o cualesquiera otras que puedan colisionar con este principio”.
Pedrera lo niega todo
Pedrera ha negado a EL ESPAÑOL que participase en tribunales supuestamente fraudulentos y afirma que “todo” lo ha hecho “siempre” acorde con la normativa legal existente. “En ningún caso he hecho nada que no estuviese entre mis competencias”, zanja en una breve conversación teléfónica. El ex director del departamento de Enfermería de la UEX no ha querido responder por qué aparece en los tribunales de manera reiterada cuando se trata de juzgar a sus compañeros del grupo de investigación y no se inhibió en los procesos.
Hay más ejemplos del modus operandis del grupo. El departamento que dirigió Predrera durante más de una década pese a que los estatutos de la UEX establece ocho como máximo, propuso a Segundo Píriz como presidente titular del tribunal que decidiría su cátedra. El presidente la Conferencia de rectores de las universidades españolas (CRUE) accede a ello, pero posteriormente se ve obligado a rechazar la propuesta a instancias del claustro de la Universidad. Es entonces cuando Pedrera recurre a un plan B para lograr su cátedra, y recurre a Virginio García Martínez -una persona de su total confianza que incluso acudió a la boda de una de las hijas de Pedrera-.
Pues bien, tras lograr su ansiada cátedra, el hijo de Virginio García aterrizado en la Facultad de Enfermería de la UEX obtiene el título de máster y de doctor con premio fin de máster y cum laude en la tesis, siendo presidente Pedreda.
Otro miembro de GIEMO, Julián Fernando Calderón, como se puede observar en la página web del grupo de investigación consiguió su plaza de profesor con un tribunal también plagado de conocidos. Tal y como se recoge en el BOE del sábado 18 de noviembre de 2006, Pedrera fue el presidente titular, su mujer Canal la secretario titular, Ángeles Gómez de GIEMo vocal 1º y como presidente suplente Virginio García.
Fuentes consultadas por EL ESPAÑOL aseguran que el rector Segundo Píriz “debería” estar al tanto del funcionamiento “desde hace años” del Departamento de Enfermería de la universidad que lidera. Así estas fuentes, remiten a un informe publicado el pasado mes de mayo por el Defensor de la UEX en el que, literalmente, realiza reflexiones como “desde 2011 han sido reiteradas las llamadas telefónicas, correos electrónicos y conversaciones personales referidas a diversos problemas en el área del departamento de Enfermería”.
“Algunas de las personas que han dialogado con el Defensor Universitario expresan que en el departamento existe un grupo de poder que controla las decisiones principales y se mantiene en el tiempo”, denuncia. Estas “personas” que alertaron de los “conflictos” que se arrastran en “el seno del departamento”, según añade, eran de “muy diversa procedencia”: profesores recién contratados, otros en mitad de su carrera profesional, otros próximos a la jubilación y estudiantes.
Este diario ha intentado en reiteradas ocasiones ponerse en contacto con Segundo Píriz y ni desde la Universidad de Extremadura ni desde la Conferencia de Rectores de Universidades Españolas (CRUE) -de la que es presidente- se ha facilitado el contacto.