El Gobierno pedirá al Congreso de los Diputados que revoque el acuerdo alcanzado este martes por toda la oposición para bloquear la ley para la mejora de la calidad educativa (LOMCE). La toma en consideración de la proposición de ley impulsada por el PSOE que pide paralizar el calendario de implantación de la ley e instar al Gobierno a llevar a la Cámara Baja una nueva norma educativa “consensuada” fue aprobada gracias a toda la oposición.
El Partido Popular sigue articulando mecanismos para frenar las iniciativas que impulse la mayoría con la que cuenta la oposición en el Congreso después de que la iniciativa del PSOE para paralizar la LOMCE ser convirtiese este semana en la primera gran derrota parlamentaria del Gobierno de Rajoy en minoría en esta legislatura.
De esta forma, el Consejo de Ministros, a propuesta de los ministros de la Presidencia y para las Administraciones Territoriales y de Educación, ha aprobado este viernes un acuerdo por el que se requiere al Congreso de los Diputados que revoque el acuerdo parlamentario “en contra del criterio del Gobierno de la nación”.
El Ejecutivo argumenta que esta disconformidad puede afectar a los Presupuestos Generales del Estado en forma de disminución de hasta 615 millones de euros procedentes del Fondo Social Europeo, “que ha comprometido financiación para la implantación de la LOMCE”.
Este es la misma razón que el Partido Popular argumentó para vetar el debate de la proposición de ley socialista en el Congreso, pero finalmente la Mesa decidió hacer caso omiso a esta petición de veto y el tema fue llevado al Pleno.
Si el Gobierno del PP se vuelve a encontrar con el ‘no’ del Congreso de los Diputados, el presidente Mariano Rajoy ya tiene un plan ‘B’: el Tribunal Constitucional. “El acuerdo adoptado constituye el trámite previo al planteamiento ante el Constitucional de un conflicto entre órganos constitucionales del Estado”.