Final a la “incertidumbre” que impera en las aulas de 2º de Bachillerato. Dos meses y medio después de que diese comienzo el curso, los alumnos de 17 y 18 años por fin sabrán de qué y cómo se tendrán que examinar en la futura prueba de acceso a la Universidad. El Ministerio de Educación y las comunidades autónomas han ultimado este lunes todos los detalles de la nueva Selectividad que contempla la LOMCE.
Los consejeros autonómicos de Educación se han reunido con el ministro para abordar el decreto que modifica las evaluaciones de Bachillerato y ESO -esta última quedará reducida a una prueba optativa, al igual que la de Primaria-. La Conferencia Sectorial se ha desarrollado con un clima mucho más distendido que en las anteriores ocasiones después de las modificaciones de las polémicas reválidas, que el Partido Popular ya da por enterradas.
Prueba de este buen clima son las declaraciones que han hecho los responsables autonómicos en materia de Educación con signo político contrario al ministro de Educación, Íñigo Méndez de Vigo. La consejera andaluza (PSOE), Adelaida de la Calle, ha afirmado que está "muy contenta" con los cambios anunciados por el Ministerio.
Por su parte, el consejero cántabro (PSOE), Ramón Ruiz, ha subrayado que este decreto "da tranquilidad y sosiego a muchas familias y alumnos" que tienen que acceder a la Universidad.
Tras las cesiones realizadas, la prueba final de Bachillerato estará compuesta de seis exámenes obligatorios -dos de ellos sólo servirán para subir nota- de asignaturas sólo de 2º y serán “muy similares” a los de la anterior Selectividad, por lo que se descarta el tipo test que planteaba en su origen la ley educativa vigente.
LAS MATERIAS A EXÁMEN
Todos los estudiantes que quieran acceder a la Universidad deberán examinarse de tres materias comunes, independientemente de la modalidad de Bachillerato que haya cursado. Estas serán: Historia de España, Lengua Castella y Literatura y Lengua Extranjera II.
Además, este primer bloque -que será puntuado del 0 al 10- lo completará otra asignatura que variará dependiendo de la rama del conocimiento cursado durante Bachillerato. Los chavales de Ciencias se examinarán de Matemáticas II, los de Humanidades de Latín, los de Ciencias Sociales de Matemáticas Aplicadas y los de Artes de Fundamentos del Arte.
El siguiente bloque -antes llamado fase específica- estará formado por otros dos exámenes de asignaturas troncales de la opción que puntuarán de 10 a 14. Esto servirá para que los alumnos que deseen acceder a titulaciones muy demandas puedan subir la nota. Aunque serán obligatorios, en ningún caso bajará la nota final del estudiante.
Estas dos asignaturas por tanto variarán también según la modalidad de Bachillerato del alumno. En Ciencias serán Biología, Dibujo Técnico II, Geología, Física o Química y en Humanidades y Ciencias Sociales serán Economía de la Empresa, Griego, Historia del Arte, Historia de la Filosofía o Geografía.
Los estudiantes del Bachillerato de Artes tendrán que elegir dos entre Cultura Audiovisual II, Artes Escénicas o Diseño.
CON UN 4 BASTARÁ PARA APROBAR
Los planes primitivos del ex ministro José Ignacio Wert pasaban por poner la barrera del aprobado de la prueba final de Bachillerato en un 5. Esto no será así, después de la presión de la comunidad educativa y de las comunidades autónomas, el Ministerio de Educación vuelve a la anterior Prueba de Acceso a la Universidad (PAU).
Si el alumno saca un 4 de media en los exámenes previstos podrá acceder a una titulación universitaria siempre y cuando la media con el expediente de Bachillerato resulte un 5. Esta media se obtendrán ponderando un 60% las notas de los dos años de Bachillerato y un 40% la nueva Selectividad.
90 MINUTOS CADA EXAMEN
Según el borrador del la última orden ministerial que regula las pruebas -que deberá ser modificado tras retoques recientes- se recoge que los exámenes de 2º de Bachillerato durarán -también como hasta ahora- 90 minutos, con descansos para los alumnos entre ellos de 30 minutos.
Estos exámenes se celebrarán en junio en todas las comunidades autónomas -cada una de ellas fijará las fechas en los próximos meses- durante la convocatoria ordinaria y en septiembre en la extraordinaria.
DESAPARECE LA REVÁLIDA DE PRIMARIA
Durante la reunión sectorial, también se ha llegado a un nuevo acuerdo. El decreto que será llevado al Consejo de Ministros -y que deberá ser convalidado en el Congreso- también convierte la prueba final de Primaria y ESO en "muestral" y no "censal" como ahora. Esto en la práctica supondrá dejar en manos de las regiones realizar estas pruebas de manera optativa para "diagnosticar" el sistema.
Además, el ministro de Educación en la rueda de prensa posterior a la reunión ha anunciado que retirará los recursos que desde su departamento tenían interpuestos contra el País Vasco y la Comunidad Valenciana por no haber realizado la prueba final de Primaria el pasado curso, tal y como recoge la LOMCE.
A su vez, según el titular de Educación, las comunidades autónomas se han comprometido a retirar todos los recursos que tenían presentados en los tribunales contra el Real Decreto de julio de las reválidas.