El brote de bronquiolitis que afecta en estos días a la Comunidad de Madrid ha evidenciado, según denuncian enfermeras de los hospitales públicos, la falta de plantilla -y de camas- en los centros sanitarios, donde las UCI pediátricas se están viendo colapsadas "por completo". "La situación es preocupante, las pediátricas están a rebosar las 24 horas del día, a la escasez de cunas se une la situación laboral precaria de los trabajadores".
Aunque la bronquiolitis es una enfermedad aguda -infecciosa e inflamatoria-, que generalmente no necesita ingreso hospitalario, algunos de los pequeños menores de tres años que llegan con este cuadro médico a Urgencias se ven obligados a permanecer ingresados en la UCI, donde comparten espacio con otras patologías. Aquí, según la normativa, son atendidos cada dos niños por una enfermera.
"Hay días en los que tenemos que atender hasta a tres niños por persona. Es una locura, no llegas a todos", explica a EL ESPAÑOL una enfermera del Ramón y Cajal que prefiere permanecer en el anonimato por temor a represalias. Según relata, en muchas jornadas de trabajo, prácticamente no le da tiempo "ni a salir del box".
Hay que tener en cuenta, explica, que algunas técnicas que en pacientes adultos pueden resultar "breves", en el caso de los niños no es así: "Canalizar una vía venosa en un niño requiere mucho más tiempo y personal que en un adulto. No sólo es la dificultad de que las venas son más pequeñas, sino también que necesitas a alguien para sujetarlo". "Esto hace que tus compañeras, al final, se tengan que encargar del resto de los niños que tú llevas", añade.
Esta situación viene provocada, tal y como denuncia el Sindicato de Enfermería SATSE por la falta de personal. Aseguran que cuando una trabajadora sanitaria enferma con gripe, su puesto en la UCI Pediátrica "lo tiene que cubrir otra compañera ya que la Consejería de Sanidad sólo cubre aquellas bajas de más de 30 días".
SÓLO UNOS DÍAS LIBRES AL MES
"En algunas UCI, hay enfermeras que sólo han librado unos pocos días a lo largo del mes y el agotamiento, el estrés y el cansancio se incrementa sustancialmente", explican desde SATSE Madrid.
Así lo explica otra enfermera consultada por este medio: "Ahora mismo tenemos bajas sin cubrir lo que hace que haya gente que se tire a veces más de 10 días sin librar y doblando turnos e, incluso así, sigamos teniendo turnos en los que nos falta una enfermera que, en muchos casos, se suple con enfermeras internas residentes". Es decir, profesionales en periodo de prácticas que siempre deberían estar bajo la supervisión de un superior.
A esto se suma la "escasez" de camas en las UCI pediátricas de Madrid. Según los datos de la Consejería de Sanidad son 57 las camas que están abiertas "y todas ellas permanecen ocupadas". "Cuando se produce un alta, se ingresa a otro menor con lo que la rotación es permanente", explican.
El director general de coordinación de la asistencia sanitaria, César Pascual, justifica la situación por el anómalo calendario de diciembre, que comenzó con una semana casi vacacional entre los dos festivos de la Constitución y la Inmaculada: "Cuando hay tantas fiestas seguidas, como no está la plantilla de al completo, está sólo el de guardia. Si hay camas libres en las UCIs meten bronquiolitis para que los niños estén más vigilados pero, en realidad, si hiciera falta la cama porque llega un niño grave, el niño con bronquiolitis se va a planta y se ingresa al que se en encuentra en estado grave".
Críticas a la Consejería
Unas declaraciones que no han gustado nada a las enfermeras del hospital público de La Paz que en una carta abierta hecha pública en la Cadena Ser, afirman que más del 50% de los niños ingresados en este centro son por bronquiolitis. Todos ellos, dicen, menores de un año por lo que necesitan un soporte "que no es viable en planta": tanto en recursos materiales, como asistencia médica y de enfermería.
"Enhorabuena por ser capaz de simplificar un problema de salud tan grave. Sus comentarios no tienen desperdicio porque ya no sólo es la ausencia de sitio físico para atender a estos niños, sino que añadimos la precariedad de la situación laboral en sectores sanitarios como el personal de enfermería por culpa de las políticas de contratación, como por ejemplo cubrir bajas por enfermedad a partir de un mes", critican.
Y le hacen una invitación tanto a Pascual como al consejero sanitario, Jesús Sánchez Martos: "Queda usted invitado a nuestra unidad para que decida allí a pie de cama, a qué niño le da el alta para que ingresen otros".