La última Encuesta de las Condiciones de Vida de los españoles del Instituto Nacional de Estadística (INE) vuelve a incidir en el gran número de españoles que están en riesgo de exclusión social. A día de hoy y pese a las mejoras de los indicadores económicos, uno de cada cinco españoles se encuentra en riesgo de pobreza -el 22,3% de la población- y vive con menos de 8.209 euros al año.
Pero el riesgo de exclusión social no es igual para todos los grupos sociales y depende en buena parte del nivel de formación. En 2016 las personas que sólo habían cursado hasta la Educación Secundaria en su primera etapa -primer y segundo curso- representaban el 29,2% de la población en peligro de exclusión, mientras que quienes tenían algún tipo de formación superior suponían el 10,3% de ese mismo grupo.
Cabe destacar que la edad también juega un papel fundamental en este sentido, ya que la tasa de riesgo de pobreza es 6,6 puntos mayor para los menores de 16 años que para el resto de la población. Una cifra que está relacionada con el tipo de hogar, puesto que las unidades familiares con mayor riesgo son aquellas en las que vive un adulto con uno o más hijos dependientes a su cargo; de hecho, el 42,2% de los hogares con estas características estaban en peligro de exclusión en 2016. Una cifra que contrasta con la de los hogares donde hay dos adultos y uno o más niños dependientes, ya que en estos casos el riesgo se reduce hasta el 25,5%. "Las menores tasas de riesgo de pobreza se daban en los hogares sin niños dependientes", sentencia el Estudio.
La pasada primavera, momento en el que el INE elaboró la encuesta, había aumentado casi dos puntos el número de hogares que llegaba a fin de mes con "mucha dificultad", hasta afectar al 15,3% de ellos. Un porcentaje que aumenta en un punto respecto al de 2014. En este sentido, la perspectiva económica de los hogares españoles no es muy alentadora, pese a que los indicadores han mejorado levemente.
Según Arope, el medidor de riesgo de exclusión social usado a nivel europeo, hoy en España el 38,1% de los hogares no tiene capacidad suficiente para afrontar gastos imprevistos, es decir, que en caso de urgencia no tienen disponibles 650 euros sin acudir a préstamos o a compras a plazos. Además, casi cuatro españoles de cada diez no pueden irse de vacaciones ni una semana al año y más del 8% se retrasa en los pagos de su vivienda (hipoteca, alquiler, gas, electricidad, comunidad...).
Respecto a la nacionalidad, el 16,6% de los españoles está en el grupo de menores ingresos, un porcentaje que es del 37,7 % para los extranjeros de la UE y del 47,1 % para los ciudadanos de otras nacionalidades.