Eran 43 mariposas de papel, inertes, sin vida, que colgaban del techo de la sala verde de los Teatros del Canal de Madrid. 43 figuritas que podían parecer un mero elemento decorativo de la gala, pero que en realidad representaban a cada una de las mujeres que han sido víctimas de la violencia machista en lo que va de año. Cuarenta y tres. Y la cifra sigue aumentando.
Con el recuerdo de todas estas mujeres —asesinadas por sus parejas o exparejas, por hombres— siempre presente, se celebró este martes la III Edición de los Premios Compromiso de Clece, una empresa de servicios que cuenta con 75.000 empleados, de los que un 10,2% pertenecen a colectivos vulnerables, y que buscaban reconocer el compromiso de entidades sociales, medios de comunicación y personalidades en la lucha contra la violencia de género.
“En esta ocasión hemos querido dedicar estos galardones, por encima de todo, a las propias víctimas”, dijo José Andrés Elizaga, director de comunicación de Clece. “Hemos evolucionado mucho, pero la realidad sigue siendo muy preocupante. Por eso, nuestro objetivo es sumar en esta lucha con lo que mejor sabemos hacer: ayudar a la integración laboral de estas personas que necesitan una salida, una oportunidad de rehacer sus vidas, de volver a ser felices”.
Cinco premios y dos menciones especiales
En el evento, conducido por la periodista Sandra Golpe, estuvieron presentes tres víctimas de la violencia machista como Nicoletta, quien relató a este periódico haber recuperado “la vida, la persona y la libertad” gracias a la aparición de Clece. Estas tres mujeres fueron las encargadas de entregar los galardones en la categoría de Mejor Proyecto Social a la Asociación Démeter por la Igualdad, a la Fundación ARED y a la Fundación Novafeina. Cada una de ellas recibirá una dotación económica de 10.000 euros.
El premio al Mejor Trabajo Periodístico recayó de forma compartida en los reporteros Chelo Tuya, de El Comercio, y Arturo Checa, de Las Provincias por sus trabajos para sensibilizar contra esta lacra social. En esta categoría también se entregó una mención especial a la sección de Sociedad de la Agencia Efe, que durante el último año ha difundido cerca de 900 informaciones “reflejando todas las perspectivas del problema con rigor y profesionalidad”.
Los periodistas Gema Nierga, Arturo Checa y Chelo Tuya.
Por último, el Premio Especial a la Personalidad más relevante en lucha contra la violencia de género fue concedido a la diputada popular Carmen Quintanilla Barba, quien en un emotivo discurso recordó que “algo falla cuando las mujeres siguen muriendo a manos de su maltratador”. “Debemos hacer hincapié en la prevención, cuya principal herramienta es la educación en igualdad. La mejor justicia no es la que castiga, sino la que evita que la violencia llegue a producirse. (…) Los sueños son el impulso que nos llevan a superarnos día a día y nuestro sueño tiene que ser la libertad de todas las mujeres”.
El jurado, que también tuvo un reconocimiento especial a la cineasta Icíar Bollaín, directora de Te doy mis ojos, estuvo presidido por el director Luis Lorente e integrado por personalidades del mundo institucional y la sociedad civil como María José Ordoñez, delegada del Gobierno para la Violencia de Género; Lucía del Carmen Cerón, directora del Instituto de la Mujer y para la igualdad de Oportunidades; Ángeles Carmona, presidenta del Observatorio contra la Violencia Doméstica y de Género; Marta Ariño, consejera delegada del grupo editorial G+J España; Fernando Grande-Marlaska, juez y vocal del Consejo General del Poder Judicial; Gemma Nierga, periodista; y Cristóbal Valderas, presidente de Clece.
139 nuevos empleos para víctimas
Durante la gala se narraron casos escalofriantes de mujeres víctimas de la violencia machista y se puso de manifiesto la falta de protección que recibe este colectivo tras denunciar a sus maltratadores. Luis Lorente, director de Rotas, una película que refleja esta problemática y de la cual también se interpretó un fragmento en forma de espectáculo coreográfico, recordó la importancia de ayudar a estas mujeres a “construir una nueva vida alejadas de la coacción y la violencia”.
Lorente, que citó al escritor y filósofo Bertrand Russell para expresar su sensación de impotencia ante esta lacra —“deseo ardientemente aliviar el mal, pero no puedo y yo también sufro—, valoró especialmente “el corazón y la humildad” de la labor desarrollada por Clece. Si bien la empresa ya contaba en sus filas con más de 180 víctimas de la violencia machista, anunció 139 nuevas contrataciones, es decir, un nuevo empleo por cada una de las entidades sin ánimo de lucro presentadas a la categoría de Mejor Proyecto Social.
La III Edición de los Premios Compromiso ha sido un homenaje a las víctimas para, de esta forma, visibilizar los abusos que sufre un género que “parece permanecer invisible”. Hoy esto, por desgracia, todavía es inevitable, pero como afirmó Raquel Gil, de la Fundación ARED, “esperamos que en el futuro no sea necesario premiar iniciativas contra la violencia de genero”. Y que las mariposas revoloteen libres, independientes, sin miedo.