La esperanza de vida media en España es de 82,71 años, la quinta del mundo después de países como Japón o Suiza. Un informe del INE afirma que el 18,7% de la población de nuestro país son personas mayores, en total 8,7 millones. A parte de que las personas mayores viven más, gracias a los avances sanitarios también se encuentran en un estado de salud mejor y prefieren permanecer en sus casas el mayor tiempo posible antes que trasladarse a una residencia.
"Hemos pasado de una sociedad rural a una sociedad de la información en 30 años. No se puede atender a las personas mayores con el modelo tradicional", cuenta José Manuel Millán Calzada, delegado de Servicios Sociales y Educación de Clece en Castilla y León. Explica que hay un cambio generacional y en el futuro "los centros de atención al mayor se basarán en que estén en casa todo el tiempo posible y, cuando ya no puedan seguir allí, que vayan a un sitio donde se sientan como en casa".
Al mismo tiempo que evolucionan las necesidades de los mayores, las residencias sufren cambios. En España hay 5.375 residencias que albergan un total de 366.370 plazas, según el Informe de Envejecimiento en Red del CSIC, publicado en febrero de este año. La apuesta del sector es ofrecer unos servicios que "se basen en las necesidades y capacidades de las personas mayores sin anular su derecho a decidir", según cuenta Laura Cantero, directora de los Centros Residenciales de Clece en Valladolid. Afirma que hasta ahora el derecho a decidir se había anulado "por una actitud paternalista, pero nos damos cuenta de que una persona se desarrolla en sí misma cuando tiene derecho a decidir". Cantero advierte que a las personas mayores se les debe tratar como siempre porque "siguen siendo la misma persona, a pesar de que tenga las capacidades menguadas".
Nuevas tendencias para el cuidado
Los cambios en el colectivo de mayores precisan de una transformación del modelo de cuidados. Se modernizan las residencias, los tratamientos y los servicios para proporcionar una atención personalizada a cada usuario. Las novedades se dan sobre todo en el espacio. Cantero explica que "nos paramos a pensar en ellos. Les preguntamos, creamos ambiente… espacios donde estén como si fuera una casa, porque ninguna persona quiere estar institucionalizada".
Otro tipo de innovaciones son las que se aplican en las terapias y actividades que los ancianos realizan en su día a día en la residencia: musicoterapia, cuidado de bebés hiperrealistas… "Hay que distinguir entre unas actividades rutinarias para todo el mundo en la residencia y hacer unas actividades significativas para cada persona", propone Cantero.
En la ayuda a domicilio también se está empezando a implantar la atención centrada en la persona y a tener en cuenta lo que realmente quiere el usuario. Para esto, son importantes las 'personas de referencia': familia, auxiliares de geriatría… porque son los que más tiempo pasan con el residente y quienes mejor conocen sus necesidades, gustos o deseos. Hay una transformación completa del sistema de cuidados. Al final, "el cambio de paradigma se da en todo. Es un cambio de mentalidad", proclama Millán.
'En mi casa', un proyecto para hacer que las personas mayores se sientan como en casa
El cuidado de personas mayores tiende a un modelo donde es el anciano quien decide cómo recibir la atención. 'En mi casa' es el proyecto que ha creado la Junta de Castilla y León para la atención centrada en la persona. Comenzó hace siete años con dos residencias, en Soria y en Palencia y ahora cuenta con 27 centros bajo este modelo. El objetivo es proporcionar a las personas mayores un cuidado personalizado para que se sientan cómodos.
La iniciativa da una atención centrada íntegramente en la persona para transformar la residencia en un lugar que consideren como un hogar. "Son como casas con salones comunes, con espacios ambientales y actividades que les recuerdan a una casa", aclara Cantero. El usuario puede llevarse su mobiliario y sus recuerdos y tener un espacio vital propio donde tenga la misma libertad que tendría en su propio domicilio.
Ahora, 'En mi casa' cuenta con un equipo de 850 trabajadores y se benefician de él más de 2.000 usuarios mayores de 65 años. Este año, Clece prevé anexionar cinco nuevos centros con 550 plazas. A largo plazo, la compañía busca expandir esta iniciativa a diversos puntos de España y Portugal para dar las personas mayores un lugar cercano para vivir esta etapa.