Los aplausos a las 20:00 o el ofrecimiento a los sanitarios de alojamiento o comida por parte de lo ciudadanos son ejemplos de altruismo y agradecimiento a estos profesionales que están salvando vidas, cada día, en los hospitales de España. Sin embargo, la cuarentena provocada por la propagación del Covid-19, también está sacando la peor cara de muchas personas. Un ejemplo de ello es el sufrido en Barcelona por la ginecóloga Silvana Bonino, quien al acudir a su coche encontró un mensaje pintado por un vecino: "Rata contagiosa".
La médico, al parecer, bajó al garaje comunitario de su urbanización, situada en la Ciudad Condal, para acudir a su lugar de trabajo, el Institut de la Dona de Barcelona (IDONA), cuando encontró la pintada de espray negro en su BMW blanco. Como se aprecia en la imagen, la pintada abarca las dos puertas izquierdas del costado del coche y algo más.
Esta especialista en Ginecología y Obstetricia de la Universidad de Barcelona, no obstante, ya ha puesto la pertinente denuncia ante los Mossos D'Esquadra, que se han hecho cargo de la investigación para determinar quién es el autor concreto del mensaje que puede enfrentarse a una acusación de delito de odio.
De hecho, este mismo martes Pilar Allúe, subdirectora general de Recursos Humanos de la Policía Nacional, ha advertido en rueda de prensa que las autoridades "siguen persiguiendo criminales, entre los que se incluyen aquellos que pueden cometer delitos de odio, como pueden ser este tipo de conductas". Así, esta miembro del Cuerpo Armado ha asegurado que "la policía sigue trabajando y que las comisarías siguen abiertas" y que los mensajes de este tipo "son denunciables, perseguibles y altamente reprobables por cualquier persona de bien".
La defensa de la sociedad
La imagen del coche pintado, que se ha hecho viral, ha sido censurada por miles de usuarios de Twitter, que defienden a la sanitaria con frases como "la ignorancia es más peligrosa que el Covid-19" o han mostrado "todo el apoyo" a la doctora Bonino, quien cada día, va a su puesto de trabajo a ayudar a los bebés a venir al mundo.
Hace unos días, además, EL ESPAÑOL contó cómo el pueblo de Alcázar de San Juan (Ciudad Real) apoyó el médico de Familia, Jesús Monllor, después de que un vecino le invitara a irse de su edificio por miedo a que lo contagiase. Una conducta que, pese a ser recriminable, no generaba "rencor" a este MIR, quien cada día trabaja en el Hospital La Mancha Centro luchando contra el coronavirus Sars CoV-2.
"Me han ofrecido casa, comida, incluso me han puesto un cartel en la puerta de mi bloque que dice Aquí vive un héroe", explicaba a este medio el MIR de segundo año. También aseguraba que el autor de ese mensaje lo había hecho "preso del miedo". El mensaje que recibió Jesús de su vecino era el siguiente:
"Hola vecino, sabemos de tu buena labor en el Hospital y se agradece pero debes pensar también en tus vecinos. Aquí hay niños y ancianos. Hay lugares como el Barataria [un hotel de esta localidad] donde están alojando a profesionales. Mientras esto dure, te pido que lo pienses".
Acoso a otros trabajadores
Pero en España, los sanitarios no son los únicos que cada día van a trabajar y se exponen a infectarse de Covid-19. Por ello, este periódico también ha denunciado el acoso que sufrió Miriam, una trabajadora de un supermercado murciano.
Sus vecinos les escribieron esto en una nota que encontró su hijo: "Somos tus vecinos y queremos pedirte, por el bien de todos nosotros, que te busques otra vivienda mientras que dura esto ya que hemos visto que trabajas en un supermercado y aquí vivimos muchas personas. No queremos más riesgos. Gracias".
Los apoyos a la trabajadora murciana, sin embargo, también vinieron desde todos los rincones de la Región de Murcia. "Hasta mis jefes me han llamado para mostrarme su apoyo", contaba Miriam Armero a este diario. Y es que la pandemia del Covid-19 es capaz de sacar lo mejor de la sociedad pero, también, conductas insolidarias de algunas personas hacia sus vecinos trabajadores, sean sanitarios o no.