La Ley de Prevención de Riesgos Laborales nace en 1995 con el objetivo de desarrollar una política de protección de la salud de los trabajadores mediante la prevención de los riesgos derivados de su trabajo. La Organización Internacional del Trabajo (OIT) en colaboración con Naciones Unidas decidió instaurar el 28 de abril Día Mundial de la Seguridad y la Salud en el Trabajo para promover la creación de una cultura de prevención en materia de seguridad y salud para todas las partes implicadas en este campo.
Uno de los objetivos principales de la OIT para este 2022 es fomentar la creación de una cultura de seguridad y salud positiva para todos los trabajadores en la que además, estos participen activamente. Una de las empresas que está trabajando en una comunicación preventiva adecuada es Clece, compañía especializada en servicios esenciales para la cual, la seguridad de las personas es una prioridad. Según cuenta Carmen Hernández Pastor, coordinadora del Servicio de Prevención Mancomunado de la compañía para Cataluña y Baleares: “Las sesiones de formación del puesto de trabajo permiten que el personal tenga comunicación directa con el técnico de prevención. En Clece esta comunicación es bidireccional porque en la formación se explican los riesgos y técnicas correctas a adoptar, y si se da el caso, se recogen propuestas por parte del trabajador.
Por su parte, Jesus Romero Cano, coordinador del Servicio de Prevención Mancomunado de Clece, afirma que: “Es muy importante para Clece observar el cumplimiento normativo y mantener la sistemática interna de la atención a la seguridad y la salud. A partir de ahí, control de ejecución en campo, auditorías internas, reuniones en las zonas para corregir desviaciones, seguimiento de objetivos y establecer estrategias de seguridad y salud”.
Formación adicional para reducir más los riesgos
Para que las personas responsables de negocio tengan medios para gestionar la seguridad y la salud y así ser capaces de reducir los riesgos inherentes a la actividad, Clece ha optado por una formación adicional a la establecida legalmente, dirigida a aquellas personas que son responsables tanto de áreas de negocio como de equipos humanos. Para ello el departamento de Relaciones Laborales imparte cursos conjuntamente con el departamento de Prevención, puesto que se tratan conceptos jurídico-técnicos en materia de seguridad y salud.
“Organizamos una gira con la que pretendíamos formar a todas aquellas personas de la compañía con personal a su cargo, para informarles sobre cuáles eran sus funciones y responsabilidades en materia de prevención de riesgos laborales”, explica Romero. “Esto refleja la importancia que da Clece a la implicación de personas con puestos de responsabilidad para comunicar la identificación de tareas de riesgo”, apunta la coordinadora.
Fue en 2015 cuando la empresa comenzó con este proyecto formativo. En los primeros 3 años Clece dio 83 cursos a casi 1.500 participantes, para lo que llegaron a invertir más de 7.000 horas. Desde entonces la empresa ha seguido trabajando en esta sistemática puesto que es importante que quienes tienen la capacidad operativa en un servicio, al nivel que sea, tengan conocimiento y poder de actuación para gestionar la seguridad y la salud de los empleados. En 2021 continuando con esta dinámica se ha impartido formación presencial a más de 50.000 personas a través de 5.000 cursos.
Se trata de algo tan importante para la compañía que incluso la dirección está directamente implicada en esta labor de formación/comunicación. “Se lleva a cabo la integración de la prevención en todos los niveles del organigrama”, afirma Hernández. De ahí que el director general y el director de Seguridad y Salud, impartieran en cada una de las direcciones de negocio, charlas bajo el título ‘Visibilidad y responsabilidad en materia de prevención de riesgos laborales’. “Buscamos que quienes gestionan equipos y personas tengan en cuenta siempre su responsabilidad en esta área, las funciones que les corresponden y que se actúe conforme a normativa y procedimiento interno”, afirma Romero.
Además del trabajo realizado por el Servicio de Prevención y por el equipo directivo, se asigna a los responsables de los servicios de la compañía el objetivo de impartir sesiones de sensibilización documentadas sobre salud y seguridad, por lo menos una vez al semestre, e inspecciones de seguridad y condiciones de trabajo en los centros que gestionen.
Un mayor seguimiento en las áreas más especializadas
Clece ofrece sus servicios a distintos sectores, algunos de ellos más especializados, que exigen un mayor control: “Dentro de la empresa hay especialmente un área, que es la de mantenimiento, en la que existe más normativa legal en cuanto a los procedimientos de trabajo, ya que se trata de tareas más especializadas y se necesita una formación reglada a los trabajadores”, explica el coordinador de servicios de Clece. Carmen Hernández añade: “En Clece siempre decimos que lo importante son las personas. Si, por ejemplo, un trabajador necesita una formación de seguridad para realizar determinada tarea, no se le permite llevarla a cabo hasta que no realice el curso, aunque eso suponga un retraso en el cumplimiento del trabajo, porque lo más importante es la seguridad personal del trabajador”.
Pese a los avances conseguidos, fundamentalmente haciendo que la actividad preventiva se inserte en la planificación y ejecución de trabajos, en Clece se sigue trabajando en la concienciación de sus más de 75.000 trabajadores en materia de prevención de riesgos laborales a través del trabajo del departamento de Seguridad y Salud y con la implicación del resto de personas que conforman la compañía.