Definir el grado de felicidad de una persona o descubrir los factores que llevan a alguien a ser más o menos feliz ha sido siempre una tarea complicada. Han sido muchos los filósofos que durante décadas se han interesado en el tema. Pero no solo los filósofos, también los científicos. La Universidad de Harvard llegó finalmente a la conclusión a través de un estudio de cuáles son las claves para ser feliz. Entre ellas destacó el hecho de mantener relaciones sociales saludables, cuidar la gratitud, mantener una mentalidad positiva, encontrar propósitos en la vida, cuidar el cuerpo y la mente y practicar la resiliencia emocional.
Pero si durante décadas ha sido complicado tratar de averiguar cuáles son los factores que llevan a una persona a ser más feliz, lo ha sido aun más el desvelar qué elementos convierten a una ciudad en la más feliz del mundo. Siguiendo esta línea, el Institute for Quality of Life y el Happy City Hub de Londres ha elaborado un listado con las 200 ciudades más felices del mundo considerando cinco áreas concretas: ciudadanos, gobernanza, medioambiente, economía y movilidad.
Según el informe, la ciudad más feliz del mundo es Aarhus (Dinamarca). Se trata de una ciudad de unos 330.000 habitantes que destaca por su estilo de vida, la buena comida y la facilidad para llegar tanto a la playa como a los bosques en apenas 15 minutos en coche. Además, cuenta con una gran oferta cultural: museos, galerías de arte e incluso restaurantes de estrella Michelín. A ella le siguen en el ranking Ámsterdam, (Países Bajos) y Bergen (Noruega).
Imagen de archivo de Aarhus, en Dinamarca.
Para elaborar el ranking, el Institute for Quality of Life y el Happy City Hub de Londres ha tenido en cuenta algunos factores como el número de habitantes, la disponibilidad de recursos o los problemas a los que se enfrentan. Otros elementos que han convertido a estas ciudades en las más felices del mundo ha sido el acceso a las áreas verdes y a la innovación.
Por detrás de estas tres, se encuentran Brisbane y Canberra (Australia), Eskilstuna (Suecia), Ginebra (Suiza), Helsinki (Finlandia), Jonkoping (Suecia) y Londres (Reino Unido). Los puestos 11 y 13 corresponden a ciudades de Estados Unidos, concretamente Los Ángeles y Nueva York, mientras que el puesto número 12 lo ocupa Montreal (Canadá).
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El ranking se divide en dos partes. Por un lado, las ciudades incluidas en la categoría 'Golden Happiest City', donde se engloban todas aquellas que ocupan los 23 primeros puestos. Este grupo lo cierra Zúrich (Suiza). Por otro, las 'Silver Cities', que engloba del puesto 24 al 100 y que incluye algunas como Múnich (Alemania), Manchester (Reino Unido), París (Francia) o Eindhoven (Países Bajos). Y es precisamente en esta categoría donde se encuentra la ciudad más feliz de España. Ocupa el puesto 69 del ranking total y es, nada más y nada menos, que Bilbao.
La ciudad ha sido elegida como la más feliz de toda España, justo por detrás de Newcastle. Los expertos han repartido a Bilbao los puntos de la siguiente manera: Población (319,1), Gobernanza (288,1), Economía (255,9), Medio Ambiente (307,3), y Movilidad (294,0). En total, la ciudad ha sumado 1464,4 puntos.
Varios jóvenes disfrutando de las fiestas de Bilbao.
La siguiente ciudad más feliz de España sería Madrid, que con 1417,0 puntos ocupa el puesto 95 del ranking global. Por detrás de ella se encuentra Barcelona, en el puesto 115 con 1362,7 puntos, León, en el puesto 119 con 1355,7 puntos y Valencia, en el puesto 125 con 1320,8 puntos. Barcelona se encuentra en el ranking justo detrás de Dubái. Por su parte, Valencia ocupa el puesto posterior a Tel Aviv.
Hay que tener en cuenta que han sido varios los factores que han convertido a Bilbao en la ciudad más feliz de España. Y es que desde hace años ha sido definida por muchos como una metrópolis moderna, a la vanguardia de sectores como el turismo o la cultura. "Una ciudad tranquila llena de vida donde tienes mucho por hacer y visita", dicen. También se destaca de Bilbao su transporte público, que de dispone de sistemas de pago amigables.
Según un estudio de la Universidad de Harvard, una de las cosas que repercute en ese buen estado de ánimo constante es el hecho de "no preocuparse por las pequeñas cosas. Es decir, ser consciente de lo importante que es relativizar las circunstancias que afectan a cada uno. Además, los expertos destacan también el hecho de darse cuenta de que la vida es corta y hay que prestar atención a las cosas que hacen felices a los ciudadanos.