Visitar y disfrutar de termas naturales de agua caliente es una de las actividades favoritas de los ciudadanos españoles. Históricamente, han sido muchos los estudios que han confirmado los beneficios que aportan este tipo de baños. A lo largo de los siglos, las aguas termales han sido utilizadas para prevenir y curar ciertas enfermedades. De hecho, en países como la India, Italia o Grecia, sus orígenes se remontan al 2000 a.C. Estados Unidos, México, Islandia o Nueva Zelanda son algunos de los países en los que predominan estos balnearios. Sin embargo, España no se queda atrás.
Se trata de un plan familiar que se puede realizar durante todo el año. Sin embargo, con la llegada del invierno y la bajada de las temperaturas, se multiplica el número de ciudadanos que recurren a realizar este tipo de actividades. Y es que bañarse en estas aguas no solo sirve como retiro y desconexión, también aporta un gran número de beneficios para la salud. Estos baños ayudan a mejorar la circulación, estimulan el sistema inmunitario, mejora el proceso metabólico, relajan la tensión y producen un efecto deputativo en la sangre.
En ocasiones, acudir a un balneario puede convertirse en un plan no apto para todos los bolsillos. Y es que la realidad es que son muchos los que cobran un elevado precio por entrar a ellos. Sin embargo, la riqueza natural de España hace que el país ofrezca una gran variedad de termas repartidas por todo el territorio y de las que se pueden disfrutar en cualquier época del año y completamente gratis.
Unas de las más famosas son las Termas de O Muíño da Veiga, en Ourense. En pleno lecho del río Miño, se encuentra este espacio de baño al aire libre al pie de un antiguo molino en madera restaurado. Una de sus principales características es que se encuentran ubicadas en una amplia zona verde recreativa. En total, cuenta con cuatro vasos principales. Uno principal de 200 m2, un segundo de 130 m2 y otros dos más pequeños de 55 y 45 m2. Además, como contraposición, ofrece uno de agua fría para experimentar los conocidos como baños de contraste.
Otros de los balnearios naturales más famosos de nuestro país son las Pozas de Arnedillo, en La Rioja. En este caso, también son de libre acceso y se encuentran al margen del río Cidacos. Se caracterizan por sus aguas con carácter minero medicinal, clasificadas como clorurado sódicas, sulfatado cálcicas, bromuradas, con iones de magnesio, hierro, silicio y rubidio, radiactivas e hipertermales. La temperatura es de 52,5 °C.
Pero estas dos no son las únicas termas naturales y gratuitas abiertas al público durante todo el año. Otra perfecta opción son las termas de Bande, en Ourense también. Estas tienen una particularidad. Y es que son de pleno uso cuando la presa de As Conchas, que retiene agua del río Limia, baja lo suficiente.
En su caso, dispone de varias bañeras y piscinas, además de un lago natural por el que sale el agua caliente. Además, a pocos metros los usuarios podrán disfrutar de los resquicios del Aquis Querquennis, un antiguo campamento romano.
Si hay algo que caracteriza a Oursense son la abudancia de termas naturales en su territorio. Además de las anteriormente mencionadas, en esta provincia gallega se encuentran también los Baños del Río Caldo. En su caso, el agua alcanza los 60º y es de mineralización débil, bicarbonatada sódica y fluorurada. Como complemento, el espacio ofrece un gran área recreativa y una playa fluvial para disfrutar en familia.
Y para cerrar el ranking, no hay que dejar a un lado la Fontcalda en Gandesa, en Tarragona. El espacio cuenta con todo lo necesario para pasar un día en familia: rocas para saltar, merenderos e incluso un restaurante.
En su caso, son conocidas por el cloruro y carbonato cálcico, sulfato de magnesio y cloruro sódico que tienen sus aguas, que oscilan los 28º. Este espectacular balneario se encuentra en El balneario se encuentra en Gandesa, entre las sierras de la Mola y el Crestall. Además, muy cerca hay un santuario donde en verano se celebran misas.
Algunas recomendaciones a tener en cuenta
Es importante que saber que, a pesar de los beneficios que ofrecen las aguas naturales, los ciudadanos sepan que los médicos y especialistas recomiendan prudencia a la hora de disfrutar de un baño en estas aguas. Debido a las altas temperaturas de los baños, se recomienda aclimatarse en la zona y esperar una hora para entrar al agua. El motivo es que es preferible, poco a poco, activar la circulación sanguínea de forma progresiva.
Otras recomendaciones importantes son que las mujeres embarazadas tienen restricciones a la hora de bañarse en las aguas termales y que no es aconsejable permanecer más tiempo en las piscinas del que recomiendan. Aun así, siempre que se tenga cuidad y se sigan los consejos de los expertos, es importante saber que todas las termas anteriormente mencionadas permanecen abiertas al público todo el año y son completamente gratuitas.