La sostenibilidad es un asunto en torno al cual se ha abierto una profunda reflexión en la sociedad. Comprometidos con el medio ambiente y el respeto por los recursos naturales, todos hemos asumido una cierta cuota de responsabilidad para contribuir a mejorar el planeta. No obstante, son las grandes empresas las que tienen un mayor potencial para impactar positivamente en este ámbito. Lo que puede no resultar tan sencillo o al menos tan evidente es el cómo alcanzar estas metas: mientras algunos sectores, por su propia actividad, pueden llevar a cabo estrategias más obvias, en otros esta ambición pasa por una planificación interna que afine al máximo cada línea de negocio para imponer rutinas más eficientes.
En el caso de Philip Morris International (PMI), la apuesta por la sostenibilidad ha adquirido un considerable peso en su política interna, siempre encaminada a minimizar el impacto negativo de sus productos en la salud pública. Para ello, la compañía está enarbolando el liderazgo de la industria del tabaco en favor de los dispositivos que eliminan la combustión y, por ende, el humo, pero con cuyo uso se inhala nicotina.
En palabras de Gregoire Verdeaux, Vicepresidente Senior de Asuntos Externos de PMI: “No cabe duda de que la mejor opción para todos los que fuman es dejar por completo el tabaco y la nicotina. Pero sabemos que muchos adultos no lo dejarán, y estas personas merecen tener acceso a mejores alternativas que seguir fumando. Estas innovaciones existen y están impulsando un cambio real”.
Pero la novedad es que, en línea con esta filosofía, Philip Morris también ha aprovechado para extrapolar esta ambición ‘sin humo’ al ámbito de la sostenibilidad, algo que la compañía percibe como “una oportunidad para la innovación, el crecimiento y la creación de valor a largo plazo”. Para ello se aprovecha no solo del compromiso con un futuro mejor, sino de la investigación y la tecnología para mejorar su eficiencia en todos los frentes, y así lo aseguran desde la compañía: “nuestra transformación no consiste únicamente en sustituir un producto por otro nuevo”, sino que también requiere “transformar toda nuestra cadena de valor, así como nuestra forma de relacionarnos con la sociedad”.
Objetivos nítidos con parámetros transparentes
Como parte de este ejercicio de valoración interna que ha hecho Philip Morris para alcanzar la máxima eficiencia en lo sostenible, la compañía también ha trabajado en la implementación de un mecanismo de evaluación para comprobar el desarrollo de cada epígrafe. Este termómetro particular refleja el estado de implementación de todo este ecosistema de medidas y estrategias que PMI pretende tener vigentes completamente en los próximos años. Y el resultado de estos análisis son una excelente herramienta para “aportar claridad a las partes interesadas internas y externas, para lo que es primordial fijar objetivos nítidos”, según la empresa.
"Las cifras son imposibles de ignorar", afirma Stefano Volpetti, Presidente de Productos Inhalados Libres de Humo y Director General de Consumo de PMI, y añade: "Ofrecen (las cifras) una imagen clara del cambio que estamos impulsando: en primer lugar, ofreciendo una gama de mejores alternativas a los fumadores adultos y, en segundo lugar, acelerando el fin de los cigarrillos”.
Y efectivamente, desde que anunciaron su compromiso de generar un futuro libre de humo en 2016, las cifras de la compañía han demostrado su avance en este sentido:
- A cierre de septiembre de 2023, la compañía reportaba que más de un 36% de sus ingresos netos totales provienen de sus productos libres de humo, acercándose al ambicioso objetivo de llegar a los dos tercios para 2030.
- Estas alternativas ya están disponibles en 82 mercados, frente al objetivo de los 100 mercados para 2025.
- Desde 2008, PMI lleva invertidos más de 10.500 millones de dólares en desarrollo, la investigación científica, la fabricación, comercialización e innovación continua de alternativas sin humo. En este sentido, en 2022 la compañía reportaba que el 74% de sus esfuerzos comerciales y el 99% de sus recursos en I+D se dedicaron a los productos libres de humo.
La directora de Diversidad de PMI, Silke Muenster, afirma que “todo lo que es cuantificable se puede realizar”, y que “exige la responsabilidad de todos” para la consecución de estas metas en las que, más allá de lo más inmediato, se debe tener la mente en el futuro porque todavía “queda mucho camino por recorrer”, recuerda.
Conquistas en el terreno ESG
Aplicar todo su potencial a los aspectos sostenibles y de responsabilidad social corporativa ya está cosechando sus frutos dentro y fuera de PMI. Porque al margen de los datos que enmarcan y ponen en valor su estrategia medioambiental, también puede poner sobre la mesa destacados avances en el terreno social y de igualdad.
Respecto a esto último, una iniciativa a destacar es la implementación del “Smart Work” en las oficinas de la compañía, como ocurrió en su filial española tras la pandemia por COVID-19, que se decidió flexibilizar la forma de trabajo en base a una máxima: la confianza mutua entre empleado y empresa. Así, los empleados pudieron elegir entre trabajar al 100% en oficinas o un modelo híbrido de 60% de la jornada de trabajo desde casa y un 40% en formato presencial.
Con esta iniciativa, la compañía ha conseguido generar un valor añadido para los empleados, y por otra, ofrecer la posibilidad de que cada uno organice su tiempo en pro de una mayor conciliación entre el ámbito personal y laboral.
Todos estos hitos se añaden a lo conseguido en el terreno ESG. Muchas de estas conquistas resultan especialmente significativas en materia de igualdad e inclusión, e incluso han sido reconocidas por entidades independientes. Es lo que ocurre con la certificación ‘Equal Salary’, que destaca a las empresas que retribuyen a sus trabajadores de forma igualitaria, y otorgó a cierre de 2022 una nueva certificación a PMI por su apuesta por la igualdad de remuneración y por un trabajo de igual valor entre todos sus empleados, en los más de 90 países en los que opera. Además, la compañía mantiene un 40,7% de mujeres en sus posiciones directivas, un hecho que el consejero delegado de PMI, Jacek Olczak, valora como algo de lo se sentirse “sumamente orgulloso” al tiempo que subraya esta diversidad como un mecanismo que “permite adoptar mejores decisiones y de contribuir a un rendimiento mejor y más sostenible”.