España tiene pueblos escondidos que son verdaderos tesoros. Rincones de los que habitualmente no se habla, pero que son perfectos para una pequeña escapada o para un viaje de unos días. Ahora que se acerca el verano, lo ideal es encontrar diminutos enclaves en los que huir de las altas temperaturas.
Lo mejor para eso, si no podemos acercarnos hasta la playa, es buscar pueblos que nos garanticen un turismo de interior interesante y fresco. Y pocas zonas hay en España mejores para eso que la provincia de Burgos, el lugar donde está el pueblo que tiene las piscinas naturales más impresionantes de nuestro país.
Se trata del pequeño municipio de Puentedey, conocido por esta particularidad. Y es que en esta escondida localidad de Castilla y León podemos darnos baños refrescantes y eternos paseos por sus bonitas calles. Además, no solo tendremos belleza natural, sino que podremos maravillarnos con las preciosas construcciones de Puentedey, un pueblo de un marcado estilo medieval.
Así es Puentedey
El viaje perfecto de muchas personas es alejarse de su día a día, del estrés de la gran ciudad, del ruido y del movimiento excesivo. Por ello, cada vez más sectores de la sociedad apuestan por las pequeñas escapadas para buscar un remanso de paz.
Un lugar perfecto para buscar la desconexión, la tranquilidad e incluso huir del calor y de las altas temperaturas que empieza a hacerse presentes en esta recta final del mes de mayo. Y que mejor escenario para encontrar ese oasis de sosiego que un pueblo de menos de 50 habitantes escondido en las inmensidades de la provincia de Burgos, en Castilla y León.
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Así es Puentedey, uno de los pueblos más bonitos y a la vez menos conocidos de España, construido sobre el curso de un río que lo atraviesa creando estampas que parecen más propias de una película de ciencia ficción que de la realidad. Y es que se podría decir que este es un municipio que surge suspendido sobre las aguas.
La fama llegó a Puentedey en el año 2022, cuando fue elegido como uno de los pueblos más impresionantes de España. Y aún hoy perdura, ya que los centenares de visitantes que llegan hasta él se quedan maravillados con sus increíbles paisajes.
Este pueblo se queda colgado sobre un arco de piedra natural a unos 15 metros de altura mientras el río Neila lo cruza, dejando una sensación de frescor casi inigualable. Este municipio, a una sola hora de Burgos, es conocido sobre todo por tener algunas de las piscinas naturales más bonitas y llamativas de toda España y de Europa.
De hecho, el modo en el que está construido, que parece capricho de las divinidades, da origen a su nombre, 'Puente de Dios'. Muchas de sus construcciones datan de la Edad Media como la iglesia románica de San Pelayo o el Palacio de los Brizuela. Sus calles estrechas y repletas de cuestas en muchas ocasiones evidencia su estilo arquitectónico medieval.
Las mejores piscinas naturales de España
Puentedey es un pueblo pequeño, coqueto y discreto, pero que puede ofrecernos todo lo que necesitamos para una escapada de verano en la que buscamos desesperadamente huir del calor. Sin embargo, se puede visitar en cualquier momento del año, ya que en función de la estación podemos emocionarnos con sus diferentes estilos de paisajes al son de los cambios de colores de la naturaleza.
Este pueblo se encuentra en la comarca de Las Merindades y está repleto, sobre todo, de piscinas naturales y cascadas. Tal y como destaca National Geographic, algunas se cuelan entre las más bonitas de España e incluso de Europa. De hecho, sobre las demás destacan la cascada de El Peñón de Pedrosa de Tobalina, la cascada de Peñaladros en el Valle de Angulo y, sobre todo, la piscina natural de Espinosa de los Monteros.
Por último, no podemos marcharnos de Puentedey sin contemplar su puente natural, hecho a base de formaciones rocosas y no por la acción del hombre, que se ilumina de forma especial al caer la noche. Todos los bonitos paseos que podemos dar a la luz de la luna en este bello pueblo deben terminar en este paraje sin igual.